Actualizado 12/05/2006 15:41

Argentina.- El Gobierno argentino y empresarios locales, posibles interesados en YPF, según la prensa de Buenos Aires


BUENOS AIRES, 12 May. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Néstor Kirchner y algunos empresarios argentinos están interesados en adquirir una parte de la filial argentina de Repsol YPF, después de que ayer el presidente de la petrolera, Antonio Brufau, admitiera la posibilidad de colocar en el mercado local entre un 15% y 20% de YPF, según informa la prensa local.

Toda la prensa nacional y económica de Buenos Aires recoge en sus portadas de hoy las declaraciones que hizo ayer Brufau ante un grupo analistas tras presentar los resultados de la compañía, en las que condicionó la medida a que el mercado esté "en condiciones óptimas" y que "se de valor" a la compañía y a sus accionistas, aunque aclaró que se trataría de reducir su participación y no ceder el control.

Y es que lo dicho ayer por Brufau no hace más que alimentar las versiones que circulan desde hace meses en Argentina sobre el interés del Gobierno de Kirchner y de algunas empresas privadas por adquirir una parte de YPF en un intento de operación similar --salvadas las distancias--, a la nacionalización de los hidrocarburos decretada el pasado 1 de mayo por el presidente de Bolivia, Evo Morales.

Al parecer, el presidente Kirchner podría anunciar en un par de semanas, durante el tradicional acto del 25 de Mayo que se celebra todos los años con motivo del Día de la Revolución, que el Estado argentino "recuperará" parte del petróleo que 'perdió' cuando en 1999 decidió vender YPF a Repsol por 13.000 millones de euros. Al menos así lo aseguran varios periódicos locales.

Además, como se trata de sumas importantes ya que se habla de cifras que pueden alcanzar los 4.000 millones de dólares (algo más de 3.000 millones de euros), hay quienes también han dejado entrever la posibilidad de que la compra se haga con participación privada. De hecho, en varias ocasiones se ha comentado que hay empresarios argentinos que podrían estar interesados en la operación.

Sin embargo, muchos analistas coincide en que a ningún empresario local ni al Estado le serviría desembolsar semejante cantidad de dinero si no pueden tener el control de la empresa. "?Cómo justificar la inversión?. ?El Gobierno pagará 3.000 ó 4.000 millones de dólares para agregar una silla a la que ya tiene en el directorio de YPF?", se preguntan.