BUENOS AIRES, 8 Mar. (Del corresponsal de EUROPA PRESS Rafael Saralegui) -
El Gobierno argentino anunció hoy una subida en la base imponible del llamado impuesto a las ganancias para que menos trabajadores en relación de dependencia tengan que pagar el tributo y que de esa forma puedan mejorar sus ingresos.
Así lo anunciaron esta mañana el jefe de gabinete, Alberto Fernández, y la ministra de Economía, Felisa Miceli, en una rueda de prensa en la Casa Rosada (sede del Ejecutivo) en la que también participó el titular de la Confederación General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano.
La medida era largamente reclamada por los trabajadores, argumentando que el constante crecimiento de la recaudación le permitía al Gobierno dejar de percibir parte del tributo de los empleados de menores ingresos.
La media tendrá un coste fiscal para el Gobierno de 1.500 millones de pesos (375 millones de euros) y entrará en vigor el próximo 1 de abril, aunque será retroactivo al 1 de enero, por lo que el impuesto que ya fue retenido será devuelto a los trabajadores.
Fernández explicó que se atendió así un "reclamo insistente" del secretario general de la CGT, Hugo Moyano, que el Gobierno considera "razonable", ya que permitirá "mejorar sensiblemente" los ingresos de muchos trabajadores en Argentina.
A su vez, la ministra Miceli sostuvo que la medida se enmarca en "la autorización que el Congreso nacional dio al Poder Ejecutivo a modificar en el término de hasta 120 días el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría".