Publicado 19/03/2015 15:43

Argentina no permitirá que Citigroup deje su negocio de custodia de títulos

Citigroup
Reuters

BUENOS AIRES, 19 Mar. (Reuters/Notimérica) -

Argentina no está dispuesta a permitir que Citigroup salga de su negocio de custodia de títulos en el país tras una reciente orden judicial que le impide procesar pagos de bonos y que podría llevarlo a perder su licencia para operar localmente, anunció este miércoles una fuente oficial.

La entidad estadounidense quedó en el medio de una dura disputa judicial entre Argentina y fondos que reclaman deuda impaga, ya que la orden de la semana pasada del juez de Nueva York Thomas Griesa fuerza a Citigroup a infringir normas del país austral.

"Ni locos" dejaremos a Citibank salir del negocio, dijo a Reuters una fuente del Gobierno argentino que participa de las conversaciones sobre el tema.

El miércoles vence el plazo de 48 horas que el Gobierno le dio a Citibank Argentina para que responda si procesará o no los pagos de deuda que vencen el 31 de marzo, que fueron emitidos bajo legislación del país sudamericano.

Argentina no pudo cumplir con el pago de parte de su deuda a mitad del 2014 por la decisión de Griesa, lo que agigantó la batalla legal.

Griesa interviene en una extensa disputa entre Argentina y acreedores de deuda a quienes dejó de pagarse en medio de un gigantesco default de unos 100.000 millones de dólares en el 2002, que llevó al Gobierno argentino a abrir canjes en 2005 y 2010 con la aceptación de un 93 por ciento de los tenedores de esos bonos.

A los fondos litigantes que tienen al menos una parte del restante 7 por ciento se los conoce como "holdouts" o "fondos buitres".

A través de un comunicado ante la justicia de Estados Unidos, Argentina rechazó el miércoles los reclamos de más de 500 bonistas de deuda en default que pidieron un "trato igualitario" (conocido como "me-too" en inglés) para obtener el pago de alrededor de 5.400 millones de dólares.

RETIRO DE LICENCIA

El miércoles, Citigroup pidió nuevamente a Griesa una suspensión temporal de la orden que le impide procesar los pagos de bonos de deuda reestructurada argentina para darle tiempo al banco a abandonar su rol de custodia de títulos en la nación sudamericana.

En una audiencia judicial en Nueva York, el abogado de Citigroup Denis McInerney señaló que si Griesa dicta una suspensión temporal de su orden -algo que se conoce como "stay"- el banco no apelará la sentencia.

La entidad ya había pedido un "stay" el lunes, pero el juez consideró que permitir los pagos del próximo vencimiento de deuda argentina violaría una cláusula de igualdad de trato frente a otros acreedores, por lo que mantuvo una decisión del 28 de julio que impide a Citigroup hacer pagos.

Previamente, Griesa había permitido tres veces a Citigroup procesar operaciones, hasta la decisión de fondo que tomó el jueves pasado y que amplía el bloqueo de los pagos de Argentina y el default selectivo del país.

Citibank Argentina debe abonar a fin de marzo unos 3,7 millones de dólares correspondientes a renta del bono "Par" .

En la audiencia del miércoles, el abogado de Citigroup dijo que "no es seguro" que el banco pueda dejar su negocio de custodia en Argentina antes del 30 de junio, cuando debería procesar otro vencimiento de deuda del país austral.

Incluso si la entidad encontrara un comprador de su cartera de los títulos afectados por la disputa judicial en Estados Unidos, la operación deberá tener el consentimiento del Banco Central de Argentina.

"Hay que ver la clase de contrato que firmó (el Ministerio de) Economía con el Citibank para entender los alcances de la custodia de títulos, pero cualquier impacto de solvencia o liquidez que pueda tener un banco (con operaciones en Argentina) es el (Banco) Central el que tiene que dar su veredicto final", explicó a Reuters una fuente de la banca oficial.

No hay antecedentes en Argentina de una operación así como lo que está planteando el Citigroup.

Citibank Argentina ocupa el puesto 12 del sistema bancario nacional de acuerdo a sus depósitos por unos 22.819 millones de pesos (2.669 millones de dólares), según datos oficiales a diciembre último, con 71 sucursales en el país y unos 2.800 empleados. Estos depósitos representan el 2,6 por ciento del total que maneja el sistema bancario argentino.

"Políticamente el Gobierno puede usar el caso del Citibank y hacerle pagar al banco las consecuencias de incumplir las leyes argentinas", señaló a Reuters otro portavoz de la banca estatal.

"Pero la quita de la licencia para operar como banco implicaría el inicio de una denuncia judicial en el fuero penal contra los directivos de la entidad, al margen de centenares de empleados sin trabajo y miles de ahorristas afectados por sus fondos depositados", añadió.