Actualizado 22/07/2009 03:06

Bernanke tranquiliza al mercado, pero permanecen dudas

Por Steven C. Johnson

NUEVA YORK (Reuters/EP) - El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, le dijo el martes al mercado exactamente lo que quería escuchar, cuando prometió que el banco central tiene la voluntad y las herramientas para guiar a la economía fuera de la recesión sin estimular a la inflación.

Pero aunque celebraron sus palabras, que provocaron un alza en el mercado de los bonos, los inversores todavía dudan si Bernanke podrá drenar rápidamente los billones de dólares inyectados en la economía durante la crisis, una vez que finalmente se dé la recuperación.

"Será increíblemente difícil para la Fed acordar cuándo será necesaria una estrategia de salida", dijo Lena Komileva, jefa de economía de mercado del G-7 de Tullett Prebon, en Londres.

"Incluso con todos los miembros de la Fed de acuerdo en el punto en el que la economía está finalmente en la ruta sostenida a la recuperación, será muy difícil", agregó.

Por ahora eso no es un problema.

Bernanke dijo el martes al Congreso que el desempleo probablemente seguirá elevado hasta 2011, manteniendo débil el gasto del consumidor y la recuperación económica lenta.

Eso implica que la Fed mantendrá las tasas de interés en cero por algún tiempo más y seguirá inyectando dinero a la economía mediante compras de deuda hipotecaria y gubernamental.

Esas políticas poco ortodoxas han inflado la hoja de balance de la Fed y han dejado a Estados Unidos con un déficit récord de 1,8 billones de dólares para el presente año fiscal.

¿INFLACION O DEFLACION?

Alan Ruskin, estratega internacional en RBS Securities, dijo que la confianza de Bernanke probablemente parte de su creencia de que la inflación no representará una amenaza, al menos en uno o dos años más.

"El debate es: ¿estamos enfrentando una amenaza deflacionaria o una amenaza inflacionaria?. Implícito en todo esto está que la inflación es una amenaza mayor, pero no es un hecho", dijo.

De hecho, indicios de que las políticas actuales ya no son necesarias -estándares de créditos bancarios más flexibles, más generación de crédito, un gasto del consumidor más alto, una brecha más estrecha entre la actual producción de la economía y su potencial completo - todavía no se producen.

Bernanke dijo que cuando la recuperación empiece a ganar terreno, la Fed tiene una serie de herramientas, más allá de elevar las tasas de referencia, que puede usar para drenar dinero del sistema, como por ejemplo pagar intereses en depósitos de la Fed y vender parte de sus títulos de largo plazo.

Pero es entonces cuando las cosas pueden ponerse inciertas, y los inversores y economistas temen que sea grande el potencial para los errores políticos.

"No tienen experiencia en salir de una gran recesión como esta, por lo que argumentar qué hacer exactamente me preocupa", dijo Dan Seiver, profesor de Finanzas en la Universidad Estatal de San Diego.

NUMEROSOS ESCOLLOS

El primer tema es el tiempo: cuándo es que la inflación se convierte en un tema de preocupación y el crecimiento del país está lo suficientemente sostenido como para garantizar el inicio de la estrategia de salida de la Fed.

"Debido a que no existe un modelo o indicador claro sobre las herramientas para salir, allí es donde está lo complicado", dijo Rudy Narvas, analista jefe de 4Cast Ltd en Nueva York.

Más aun, todas las herramientas políticas tienen imperfecciones. Normalmente, los bancos centrales drenan dinero desde el sistema elevando las tasas de interés y vendiendo títulos, pero esto último se hace más difícil con la crisis, dijeron analistas.

Una vez que complete sus planes de compra de activos, Bank of America-Merrill Lynch estima que la Fed tendrá 1,25 billones de dólares en deuda del Tesoro, de agencias y en deuda privada respaldada en hipotecas.

Bank of America-Merrill Lynch estima que recortaría las tenencias del Tesoro en sólo 77.000 millones de dólares en 2010.

Un peor escenario podrían ser el de los extranjeros saliendo del dólar y los bonos del Tesoro, elevando aún más los rendimientos y frenando una recuperación.

Hay otras opciones, pero también tienen dificultades.

Por lo pronto, la Fed está todavía a un año o más de implementar una estrategia de salida, pero aun eso es un frío consuelo.

"Esta es una incertidumbre que va a estar con nosotros durante años", dijo Komileva. "La única cosa que sabemos es que la economía aún no llega hasta ahí", agregó.