Actualizado 07/07/2015 06:35

BOJ ofrece visión más pesimista sobre exportaciones, mantiene política sin cambios

Por Leika Kihara

TOKIO, 8 ago, 8 Ago. (Reuters/EP) -

- El Banco de Japón mantuvo su opinión de que la economía nipona se está recuperando, pero ofreció una opinión sombría respecto a las exportaciones y la producción, reconociendo una serie reciente de datos débiles que echó por tierra las esperanzas de que los envíos al extranjero repuntarán a tiempo para compensar el dolor de un aumento del impuesto sobre las ventas en abril.

El banco central, sin embargo, añadió que el gasto de los hogares sigue firme, lo que subraya su convicción de que no se necesita un nuevo estímulo, aún cuando se espera que unos datos revelen la próxima semana la mayor contracción de la actividad económica desde la crisis financiera global.

"Las exportaciones han mostrado cierta debilidad", dijo el Banco de Japón (BOJ, por su sigla en inglés) en un comunicado emitido después de la reunión de política monetaria el viernes, revisiando a la baja su evaluación desde el mes pasado.

"La producción industrial ha seguido creciendo moderadamente como una tendencia, aunque ha mostrado recientemente cierta debilidad", dijo el banco central. Esa fue una visión menos optimista que el mes pasado, cuando dijo que la producción se estaba incrementando como una tendencia.

Los mercados se están centrando en cómo el gobernador Haruhiko Kuroda describirá los riesgos para las perspectivas en su conferencia de prensa posterior a la reunión, aunque muchos analistas esperan que reitere su opinión de que la economía puede resistir el golpe de la subida de impuestos sin un estímulo a corto plazo.

"El Banco de Japón no necesita cambiar sus expectativas de que la inflación se acelerará de nuevo debido a la fuerte demanda interna", dijo Shuji Tonouchi, estratega de renta fija de Mitsubishi UFJ Morgan Stanley de Valores. "Sin embargo, los riesgos en el extranjero han aumentado, y esto pone el BOJ en una posición más incómoda", agregó.

Tal como se esperaba, el Banco de Japón mantuvo su marco de política, en el que se ha comprometido a aumentar la base monetaria en entre 60 y 70 billones de yenes (587.000 a 685.000 millones de dólares) al año a través de compras agresivas de activos para reactivar la moribunda economía y llevar la inflación hacia un 2 por ciento en algún momento del año que viene.

Las exportaciones cayeron inesperadamente en junio por segundo mes consecutivo y la producción cedió a su ritmo más acelerado desde el terremoto de marzo del 2011, poniendo en duda la opinión del BOJ de que la economía superará rápidamente el dolor del alza impositiva en abril.

Una encuesta privada del sector fabril mostró que los nuevos pedidos de exportación crecieron en julio por primera vez en cuatro meses, aunque sólo modestamente.