Por Hideyuki Sano
TOKIO, 1 jul, 1 Jul. (Reuters/EP) -
- Las bolsas en Asia se mantenían el martes cerca de máximos en tres años gracias a unos datos optimistas de manufactura en China y por las expectativas de que la política monetaria de Estados Unidos se mantendrá laxa por algún tiempo, mientras que el dólar se debilitaba de manera generalizada.
En Japón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio cerró con un alza de un 1,1 por ciento a 15.326,20 puntos, su nivel de cierre más alto desde el 24 de junio.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón cotizaba plano, justo por debajo de un máximo en tres años que anotó hace tres semanas. Los mercados de Hong Kong estaban cerrados por un feriado.
En China el índice oficial de gerentes de compras (PMI, por su sigla en inglés) mostró un una expansión del sector fabril a un máximo de seis meses durante junio, como se esperaba, y una encuesta privada similar también mostró una fuerte actividad, lo que refuerza las señales de estabilización en la economía.
Por el contrario, una serie de datos económicos optimistas publicado el lunes en Estados Unidos hizo poco por reducir las expectativas -reavivadas tras un dato de crecimiento sorprendentemente débil en el primer trimestre- de que la Reserva Federal mantendrá una política expansiva por algún tiempo.
Un indicador de ventas de casas en Estados Unidos subió a un máximo de ocho meses en mayo, mientras que un indicador de la actividad manufacturera en la región central bajó ligeramente desde un máximo en siete meses.
"La presidenta de la Fed, Janet Yellen, ha mostrado preocupación sobre la debilidad en el mercado laboral. Así que esperamos que la Fed mantenga una política orientada a apoyar el crecimiento", dijo Takuro Nishida, director adjunto de planificación de inversiones en Sompo Japan Nipponkoa Insurance.
El presidente de la Fed de San Francisco, John Williams, dijo el lunes el banco central de Estados Unidos probablemente tendrá que mantener las tasas de interés cerca de cero por al menos otro año, aún cuando expresó optimismo de que la economía está en una senda de recuperación.
Mientras que un reporte de empleo en Estados Unidos que será publicado este jueves tiene el potencial de cambiar esa percepción, los inversores por ahora están contando con una política laxa de la Fed, lo que ha aumentado la presión sobre el dólar.
El índice dólar, que sigue el desempeño del billete verde frente a seis divisas importantes, tocó un mínimo en siete semanas de 79,759 el lunes y el martes se mantenía apenas por encima de ese nivel en 79,840.
Ante la debilidad de la moneda estadounidense, el euro alcanzó un máximo en seis semanas de 1,3698 dólares el lunes y cotizaba a 1,3687 dólares en la sesión asiática.
La moneda japonesa también alcanzó un máximo en seis semanas de 101.235 yenes el día anterior, antes de retroceder levemente a 101,43 unidades.
El oro al contado alcanzó un máximo en dos meses y medio de 1.332,10 dólares la onza y más tarde se situaba en 1.327,80 dólares, ayudado por la debilidad del dólar y las tensiones geopolíticas.
Algunos participantes del mercado han dicho que las preocupaciones geopolíticas pueden reduciendo el apetito por el riesgo, en momentos en que la guerra civil en Irak parece estar profundizándose luego de un líder militar suní fue declarada como califa de un nuevo estado islámico en tierras conquistadas a través de una franja de Irak y Siria.
Si bien la noticia tuvo poco impacto inmediato en muchos mercados financieros, algunos operadores piensan que podría existir una repercusión debido a que el desarrollo podría desestabilizar la rica en crudo de Oriente Medio.
El petróleo estadounidense cotizaba a 105,72 dólares por barril, con un alza de un 0,3 por ciento respecto a los niveles de Estados Unidos pero lejos del máximo de 107,73 dólares que alcanzó hace menos de dos semanas.