Publicado 21/01/2015 08:20

Bolsas de Asia suben impulsadas por esperanzas de estímulo del BCE, decisión del BOJ impulsa al yen

Por Hideyuki Sano

TOKIO, 21 ene, 21 Ene. (Reuters/EP) -

- Las bolsas de Asia alcanzaron un máximo en seis semanas y el euro se mantenía bajo presión el miércoles en momentos en que los inversores esperan que el Banco Central Europeo dé a conocer nuevas medidas de estímulo, y el yen saltó después de que el Banco de Japón dejó su política monetaria sin cambios.

El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón subía un 1,3 por ciento.

En Japón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio rompió la tendencia y perdió un 0,5 por ciento, mientras que el yen ganó un 0,9 por ciento a 117,76 dólares tras la noticia de que el BOJ (por su sigla en inglés) no amplió su estímulo.

Mientras que la decisión había sido ampliamente esperada, algunos operadores habían apostado por una sorpresa del gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, en momentos en que el objetivo de inflación del banco central para el próximo año se ve cada vez más lejano.

En general, los precios de las acciones globales se han apoyado en las últimas sesiones por la creciente convicción de los inversores de que el BCE adoptará un alivio cuantitativo en su reunión del jueves.

"Todo el mundo está hablando del resultado de la reunión del BCE", dijo Kara Ordway, operadora de City Index en Sídney. "Los mercados operan de manera volátil porque hay tanta incertidumbre".

El euro se debilitaba a 1,1570 dólares.

Sin embargo, la incertidumbre sobre qué es lo que hará exactamente el BCE mantenido a muchos inversores en guardia, sobre todo teniendo en cuenta que el Bundesbank alemán se niega a una impresión de dinero a gran escala.

"El mercado parece estar esperando una flexibilización cuantitativa de al menos 500.000 millones de dólares (...) pero hay una posibilidad de que la acción del BCE sea menos agresiva de lo que algunos están esperando", dijo Shuji Shirota, director asociado de HSBC en Tokio.

El espectro de un estímulo del BCE y la reciente volatilidad en los mercados globales causada por el desplome de los precios del petróleo impulsaba la demanda de metales preciosos vistos como un refugio seguro.

El oro al contado extendió su repunte a un máximo en cinco meses, por encima de 1.300 dólares la onza por primera vez desde agosto, después de haber trepado un 10 por ciento en lo que va del año. Más tarde cotizaba a 1.383,11 dólares la onza.

Los precios de las materias primas se mantenían bajo presión, y el petróleo cayó hasta un 5 por ciento en un punto el martes después de que el Fondo Monetario Internacional recortó su pronóstico para la economía mundial en el 2015.

El crudo Brent de Londres subía el miércoles para cotizar a 48,33 dólares el barril, aunque aún acumula un retroceso de un 3,6 por ciento en la semana.