Por Kevin Plumberg
HONG KONG (Reuters/EP) - Las bolsas de Asia y los precios de las materias primas repuntaban el jueves luego de que la Reserva Federal dijo que veía estabilidad en la economía estadounidense, lo que llevó a los inversores a recomprar acciones y otros activos de riesgo y a vender dólares.
El optimismo impulsó los precios del petróleo hasta casi 71 dólares el barril y llevó los precios del cobre a máximos en 10 meses, ante la esperanza de una demanda sostenida de materias primas.
Aunque la mayoría de las bolsas asiáticas exhibían ganancias durante la jornada, casi no han experimentado variaciones en lo que va de agosto y los inversores aún están indecisos sobre qué podría apoyar los valores además del sentimiento alcista.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón repuntaba un 2,05 por ciento, con las mayores ganancias extendiéndose a través de los sectores de consumo masivo, energía, finanzas y tecnología.
El índice han tenido altibajos en las semanas recientes, pero exhibe un alza de un 72 por ciento desde el 9 de marzo, cuando comenzó un repunte bursátil global.
El índice promedio japonés Nikkei trepó un 0,8 por ciento, impulsado por una variedad de grandes exportadores de automóviles y tecnología.
Las acciones del fabricante de baterías GS Yuasa y Mizuho Financial se encontraban entre los papeles más fuertemente operados en Tokio.
El índice Hang Seng de Hong Kong repuntó un 2 por ciento. Las acciones de Tencent Holdings avanzaron un 4,3 por ciento y tenían el mejor desempeño del índice luego de que el mayor operador de la mayor plataformas de mensajes instantáneos de China dijo el miércoles que su ganancia neta creció un 85 por ciento en el segundo trimestre.
Las acciones operadas en Shanghái revirtieron su curso para subir un 0,9 por ciento, luego de caer un 4,7 por ciento el miércoles por la preocupación de que el repunte del mercado ha ido más allá de la recuperación económica china.
Pese a ésto, el índice de Shanghái ha registrado algunas de las mayores pérdidas en Asia en lo que va el mes, con un declive de un 9,3 por ciento.
El dólar se debilitó de manera generalizada, sugiriendo que la relación inversa entre las acciones y la divisa se mantiene pese a haberse suavizado luego de que los datos laborales para julio dados a conocer el viernes llevaron a subir las apuestas por un aumento de las tasas en Estados Unidos.
El euro subía un 0,4 por ciento, a 1,4251 dólares, mientras el dólar se apreciaba un 0,2 por ciento, a 96,20 yenes, pero la divisa estadounidense perdía un 0,14 por ciento en el índice dólar ante una canasta de monedas.
El cobre operado en Shanghái repuntaba un 4,3 por ciento luego de que el contrato para entrega en tres meses de la Bolsa de Metales de Londres tocó su máximo desde el 1 de octubre, a 6.340 dólares la tonelada, gracias al entusiasmo por la descripción de la economía ofrecida por la Reserva Federal.
El crudo estadounidense para entrega en septiembre subía un 1 por ciento, a 70,85 dólares el barril, y el crudo Brent de Londres repuntaba un 1 por ciento, a 73,64 dólares.
A fines de junio, el crudo estadounidense tocó un máximo en 8 meses a 73,38 dólares.