Por Pedro Nicolaci da Costa
NUEVA YORK (Reuters/EP) - Los precios de la deuda estadounidense treparon el martes, luego que una sólida subasta de notas a dos años alentara la tendencia al alza de cara al final de la reunión mensual de la Reserva Federal.
Los 104.000 millones de dólares en deuda que se subastarán esta semana empezaron con una demanda excepcionalmente fuerte por los 40.000 millones de dólares en notas dos años puestos el martes en el mercado, incluyendo una demanda indirecta récord.
"Fue una subasta como Sally Field. A ellos les gustó; realmente les gustó", dijo John Canavan, analista de Stone & McCarthy Research Associates en Princeton, Nueva Jersey.
La subasta llegó después de que datos mostraran que las ventas de casas usadas en Estados Unidos fueron más débiles que lo esperado en mayo, apuntando a una lenta recuperación de la severa recesión económica.
La nota de referencia a 10 años subió 10/32 en precio, con un rendimiento de 3,65 por ciento.
Los resultados de la subasta fueron sólidos, con la demanda general a su nivel más alto en cerca de dos años y el interés de los compradores indirectos, una aproximación de la compra extranjera, a un nivel sin precedentes de 68 por ciento.
"La fortaleza de la subasta de hoy sugiere una demanda particularmente fuerte en el lado de la compra que yo sospecharía también apoyaría a la subasta de mañana, aunque no al mismo nivel", dijo Canavan.
Sin embargo, esto no quiere decir que no exista ansiedad sobre la capacidad del mercado de digerir las ventas pendientes de notas a cinco y siete años del miércoles y el jueves respectivamente, particularmente dado que la emisión en estas notas ahora será mayor que en el mes pasado.
Por otra parte, los operadores temieron que, en medio de los crecientes temores sobre la inflación, la Fed podría señalar una salida eventual de sus facilidades de préstamos de emergencia en el comunicado posterior a su reunión.
Pero ese momento aún no ha llegado, como mostraron las evidencias de una persistencia en los problemas de la vivienda. Aunque las ventas de casas usadas subieron en mayo, el incremento fue menor a lo esperado y provocado en gran parte por las ventas de ejecuciones.
"Es un reconocimiento de una economía estancada", dijo Jessica Hoversen, analista de mercado de renta fija de MF Global Research en Chicago.
"Es ingenuo desear una recuperación rápida dada la recesión sin precedentes. El consumidor aún está altamente desapalancado y las compañías son renuentes a contratar", agregó.
Una fuente potencial de soporte para los bonos provino de Mody's Investors Service, que dijo el martes que la calificación crediticia AAA de Estados Unidos estaba segura.