Actualizado 11/07/2013 03:48

Brasil vuelve a elevar tasas para controlar la inflación

Por Alonso Soto


BRASILIA, 11 Jul. (Reuters/EP) -

- El Banco Central de Brasil subió el miércoles su tasa referencial de interés en 50 puntos básicos, al 8,50 por ciento, como esperaba el mercado, en otro esfuerzo por contener el avance de la inflación en la mayor economía de América Latina.

La decisión del comité de política monetaria del banco, el Copom, de llevar la tasa del 8 por ciento, al 8,50 por ciento fue unánime.

De 57 economistas consultados por Reuters, 50 habían apostado a que el banco central elevaría la tasa Selic en 50 puntos básicos.

Bajo el mando de Alexandre Tombini, el Banco Central de Brasil subió su tasa tres veces seguidas en lo que va del año, para luchar contra un aumento de los precios internos que ha frenado el consumo y la producción industrial.

En junio, la inflación en Brasil creció a su ritmo más rápido en 20 meses.

"El Comité entiende que su decisión contribuirá a bajar la inflación y asegurar que la tendencia continúe el año próximo", dijo la entidad en un comunicado, repitiendo el lenguaje usado en la decisión previa.

Una fuerte depreciación del real, que hace subir los precios de los bienes importados, ha elevado aún más los riesgos para el banco central en momentos en que trata de recuperar sus credenciales en la lucha contra la inflación con un nuevo ciclo de ajuste, que algunos economistas dicen podría llevar las tasas de vuelta a los dos dígitos.

El Banco Central prometió que la inflación sería menor a la marca del 5,84 anual del 2012.

La alta inflación ya ha comenzado a dañar el poder adquisitivo de los brasileños y amenaza la popularidad de la presidenta Dilma Rousseff, quien se ha comprometido a mantener bajos los costos de endeudamiento de Brasil para consolidar una década de fuerte crecimiento que sacó a más de 40 millones de brasileños de la pobreza.

Rousseff intenta aplacar las extendidas manifestaciones que tuvieron lugar en las últimas semanas contra los deficientes servicios públicos y la corrupción.

La presidenta, que buscaría la reelección el próximo año, ha prometido incrementar la inversión en servicios públicos y mantener la disciplina fiscal, está tratando de recuperar a los inversores preocupados por dos años de crecimiento económico mediocre.

En un guiño al banco central, el Gobierno de Rousseff prepara un recorte presupuestario para ayudar a luchar contra los aumentos de precios. El ministro de Hacienda, Guido Mantega, ha dicho que los recortes serán de menos de 15.000 millones de reales (6.630 millones de dólares).