BOGOTA (Reuters/EP) - La reunión extraordinaria de líderes de la Unasur que se realizará en Argentina y a la que asistirá el presidente Alvaro Uribe no condicionará la firma de un acuerdo militar entre Colombia y Estados Unidos, informó el jueves Bogotá.
El encuentro fue convocado por los mandatarios de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) ante la preocupación que despertó el anuncio de Colombia de firmar el convenio, que le permitirá a Washington utilizar siete bases militares en el país andino para realizar operaciones antidrogas.
Pero Uribe pidió que en la reunión se aborde además el tema del terrorismo y del tráfico ilegal de armas en la región.
"La agenda será diversa y la reunión no implica condición para el acuerdo entre Colombia y Estados Unidos, a fin de enfrentar con más éxito el narcotráfico y el terrorismo", precisó un comunicado de la presidencia colombiana.
Uribe confirmó posteriormente en una conferencia de prensa que acudirá con su canciller a la reunión en Argentina "porque para esta cita no se dan las restricciones que nos impidieron asistir a la última", aunque se abstuvo de detallar los impedimentos.
Fuentes de la cancillería dijeron que Colombia no fue al encuentro en Quito, así como no irá a la reunión de ministros de Defensa el 24 de agosto también en esa ciudad, por insultos propinados por el mandatario ecuatoriano Rafael Correa, por la instauración de demandas y porque las relaciones diplomáticas entre los dos países están interrumpidas.
Quito rompió relaciones con Bogotá desde marzo del año pasado, tras el bombardeo de fuerzas militares colombianas a un campamento de la guerrilla de las FARC en territorio ecuatoriano, en el que murió el jefe de esa guerrilla Raúl Reyes.
Funcionarios de los ministerios de Defensa, del Interior y Justicia, así como de la cancillería colombiana se encuentran en Washington finiquitando los detalles para dejar el acuerdo listo para su posterior firma.
El comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla, confió el miércoles en que los detalles del acuerdo queden resueltos este mismo fin de semana.
El anuncio del convenio produjo un rompimiento en las relaciones diplomáticas y comerciales por parte del presidente venezolano Hugo Chávez, con Colombia, debido a que el mandatario ve como una amenaza para la seguridad el aumento de la presencia estadounidense en su país vecino.
Chávez dijo recientemente que la única manera de salir de la crisis en la relación con Colombia es que Uribe desista de firmar el acuerdo con Washington.
LUCHA DEBE SER COMPARTIDA: MEXICO
La controversia polarizó aún más a Sudamérica, donde han llegado en los últimos años líderes con políticas socialistas de la mano del respaldo de Chávez, un fuerte crítico de Estados Unidos.
Por su parte, el mandatario de México, Felipe Calderón, dijo en una visita a Bogotá que respeta la decisión de los países en función de la salvaguarda de sus soberanías, pero que se requiere de una integración para combatir al narcotráfico.
"Coincidimos en que el crimen organizado transnacional y, en particular el narcotráfico, es un problema que afecta a toda la región, que la lucha contra la delincuencia debe ser también una responsabilidad compartida", manifestó.
Colombia es considerado el mayor productor de cocaína del mundo y el Gobierno acusa a las guerrillas de financiar con el tráfico de drogas su lucha en contra del Estado.