BOGOTA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente colombiano, Alvaro Uribe, llegará mañana a Washington para tratar de "destrabar" algunos aspectos que se han convertido en impedimentos para llegar a un acuerdo sobre el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia y Estados Unidos, después de que hoy quedara suspendida la ronda de inicio de las negociaciones por que los representantes colombianos no pudieron llegar a tiempo a la capital estadounidense por condiciones meteorológicas adversas.
Uribe participará en las gestiones previstas con el Departamento de Estado norteamericano y otras instancias gubernamentales. Tratará así de dar un impulso a la negociación, que han permanecido estancadas debido especialmente a asuntos sensibles en materia agrícola, sector en el que Colombia está dispuesto a una apertura, pese a que en algunos productos clave se busca que la liberalización sea menor y lo más lenta posible en materia de desgravación.
El presidente buscará que el sector arrocero no se arruine y que el sector avícola colombiano continúe manteniendo su sostenibilidad pese a la apertura de las fronteras comerciales entre ambos países. En otro tipo de productos, caso del tabaco, los lácteos, carnes y azúcar, se buscará la apertura así como la agilización de los procedimientos sanitarios que permiten las importaciones.
En este sentido, Uribe señaló hoy, antes de partir a Estados Unidos, que pese a que se tienen claras las dificultades, el TLC con el gigante económico estadounidense puede generar amplios beneficios para Colombia. "Yo le rogaría a los colombianos que tengamos absoluta claridad sobre la conveniencia y la necesidad del Tratado, y también sobre sus riesgos. Las conveniencias y la necesidad del Tratado son infinitas", indicó el jefe del Estado, según cita la emisora 'RCN'.
"PERDIDAS BARBARAS"
No son de la misma opinión los diputados del Congreso colombiano que hoy formaron un bloque de oposición al Tratado de Libre Comercio y afirmaron que se opondrán a la ratificación del posible acuerdo, puesto que la entrada en vigor del TLC podría suponer "la sentencia para el sector agrícola" y perjuicios "costosos para el sistema en materia de salud", recoge 'Radio Caracol'.
Según este bloque, las pérdidas para el sector del algodón, el trigo y la cebada podrían ser "bárbaras", así como para la producción de arroz, carnes y productos lácteos. La posibilidad de importaciones libres de aranceles procedentes de Estados Unidos de este tipo de productos arruinaría a los productores nacionales, aseguran los opositores al tratado.
Mientras tanto, el jefe del equipo negociador colombiano, Hernando José Gómez, aseguró que la negociación ha entrado en la etapa final que tendrá como eje fundamental la negociación de los temas agrícolas, asunto en el que se intentará obtener las mejores condiciones para los productores colombianos de arroz y pollo, señaló.
"Esto es parte del proceso de negociación en el que estamos embarcados. Estamos tratando de lograr un escenario lo menos perjudicial para esos dos sectores que en particular son importantísimos tanto por la generación de empleo como por la ocupación del territorio que hoy en día tienen", señaló Gómez.