Actualizado 24/07/2009 01:55

Compradores de deuda mala a la espera de mejor precio

Por Sweta Singh

NUEVA YORK (Reuters/EP) - Lo peor aún no ha llegado para el consumidor estadounidense, agobiado por una pesada carga de deuda, restricción del efectivo y un creciente desempleo.

Al menos así lo consideran los grandes cobradores de deuda, muchos de los cuales se abstienen de adquirir de los bancos y otras instituciones demasiada deuda de consumidores en problemas, apostando a que se hará mas barata al languidecer la economía.

Con el alza en el desempleo y en los compromisos de pagos, compañías como Portfolio Recovery Associates Inc, Asset Acceptance Capital Corp y Encore Capital Group Inc esperan poder obtener carteras de deuda mala a precios de liquidación más adelante este año.

Una vez que adquieren carteras de deuda impaga, estas firmas trabajan agresivamente para obtener al menos un repago parcial de los agobiados prestatarios, acosándolos vía llamadas telefónicas, mensajes de texto y correos electrónicos.

"Una vez que deciden comprar las carteras y tener una cantidad considerable, esas carteras pueden ser lucrativas para los compañías durante varios años", dijo Sameer Gokhale, analista de Keefe, Bruyette & Woods.

Esas compañías podrían obtener enormes ganancias futuras si caen los precios de la deuda mala, ya que tendrían una mayor probabilidad de obtener mejores retornos una vez que se afirme la situación económica en el país.

"Nuestra estrategia ha sido reducir las compras (...) estamos a la espera por precios ventajosos", dijo Rion Needs, presidente ejecutivo de Asset Acceptance Capital, en una reciente entrevista.

El ejecutivo espera que los precios de la deuda del consumidor toquen un fondo en el segundo semestre del año y sostiene que la compañía incrementará la compra de carteras de deuda en mora el tercero y cuarto trimestre.

El golpeado consumidor, y el consecuente aumento en la morosidad de pago y amortizaciones, no son las únicas razones por los cuales se espera que se desplomen los precios de compra de deuda impaga.

Los precios de las carteras de deuda también podría caer debido a la falta de financiamiento para firmas como Asset Acceptance y sus rivales, un factor que deprime la actividad de los negocios del sector, dijeron analistas.

Los cobradores de deuda dependen de los bancos para financiar sus compras. Con los mercados de crédito aún restringidos, encuentran ahora que es más difícil obtener préstamos bajo términos razonables.

RENTABILIDAD A FUTURO

Pero luego de recaudar miles de millones de dólares como resultado de las pruebas de tensión del Gobierno, los bancos están ahora más dispuestos a vender sus carteras de deuda mala a precios menores para limpiar sus hojas de balance, dicen los analistas.

Las advertencias de los cobradores sobre adquirir deuda mala también podrían derivarse de anteriores experiencias.

No hace mucho tiempo, pagaron precios altos por algunas carteras de deuda y tuvieron que registrar cargos para ajustar la caída de los activos en sus resultados debido a que las cobranzas se hicieron difíciles y cayeron por debajo de sus estimaciones.

Bajo las reglas contables, los compradores de deuda deben absorber cargos por ajustes cuando sus cobranzas caen por debajo de las expectativas o se sitúan debajo de sus precios de compra.

Mientras que el panorama a corto plazo se mantiene modesto porque las compañías aún recuperan deudas compradas hace varios años -Portfolio Recovery todavía sigue cobrando deudas que compró en 1996- no pueden descartarse beneficios a largo plazo cuando la deuda se compra a precios muy bajos.

Existe la posibilidad de que las compañías que cobran deuda puedan ser más rentables en el futuro, porque los precios bajos de sus compras incrementarán los márgenes de beneficios de lo que puedan recuperar, dijo el analista Larry Berlin de First Analysis Securities Corp.

Al comprar carteras de deuda a precios muy bajos -centavos por dólar- esas compañías limitarán sus probabilidades de tener que registrar pérdidas por ellas. Al contrario, podrían ver trepar sus ganancias, incluso si lograr recuperar el pago de sólo una pequeña porción de las carteras adquiridas.