Publicado 11/10/2013 16:57

Congreso de EEUU trabaja con urgencia para poner fin a disputa fiscal

Por Richard Cowan

WASHINGTON, 11 oct, 11 Oct. (Reuters/EP) -

- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, seguirá presionando para una pronta reapertura del Gobierno federal, sumada a un incremento de emergencia de la autoridad de endeudamiento del país cuando se reúna el viernes con republicanos del Senado.

Con una paralización parcial del Gobierno en su undécimo día y a menos de una semana antes que el Departamento del Tesoro se quede sin dinero para pagar los gastos del Gobierno, el presidente demócrata ha estado instando a los republicanos en el Congreso a que pongan fin a la disputa fiscal.

El vicepresidente Joe Biden se sumará a Obama en la presión por medidas rápidas, que podrían verificarse el fin de semana si una serie de esfuerzos de republicanos en el Congreso y el Senado rinden frutos.

El jueves por la noche, los republicanos de la Cámara de Representantes analizaban posibles cambios a un plan vago que propusieron y que daría a Obama un incremento de corto plazo en el límite de endeudamiento, y que reabriría al Gobierno.

Sin embargo, quedaban muchos detalles por esclarecer, incluyendo lo que los republicanos obtendrán a cambio.

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, dijo que él y sus correligionarios quieren compromisos sólidos de Obama y de los demócratas en el Congreso sobre medidas para reducción del déficit a más largo plazo.

La fecha límite del 17 de octubre para elevar el techo de la deuda o correr el riesgo de caer en una histórica cesación de pagos era inquietante, porque cualquier acuerdo que sea alcanzado por los líderes podría enfrentar la resistencia de conservadores tanto en la Cámara de Representantes como el Senado.

Eso es particularmente problemático en el Senado, donde los retrasos en los procedimientos pueden demorar la legislación en hasta una semana, que es más o menos el tiempo que falta hasta que la autoridad de endeudamiento se acabe, según el secretario del tesoro, Jack Lew.

(Traducido por Miguel Folatelli. Editado en español por Patricio Abusleme)