Actualizado 02/08/2013 21:22

Creación de empleos en EEUU cae en julio, pero tasa desempleo toca mínimo en 4 años


WASHINGTON, 2 Ago. (Reuters/EP) -

- Los empleadores estadounidenses bajaron el ritmo de las contrataciones en julio, pero aún así la tasa de desempleo cayó, en señales mixtas sobre el mercado laboral que podrían llevar a que la Reserva Federal sea más cautelosa en torno a la esperada reducción de su enorme programa de estímulo monetario.

El número de empleos fuera del sector agrícola se incrementó en 162.000 en julio, el menor aumento en cuatro meses y menos de lo esperado por analistas, dijo el viernes el Departamento de Trabajo.

La deslucida lectura refuerza la visión de que el mercado laboral avanza lentamente hacia la recuperación tras la recesión del 2007-2009, con la economía en general aún marchando a baja velocidad.

"Estamos avanzando a paso de tortuga", dijo Gordon Charlop, director gerente de Rosenblatt Securities en Nueva York.

Al mismo tiempo, las contrataciones de personal el mes pasado fueron suficiente para reducir la tasa de desempleo a un 7,4 por ciento, su menor nivel desde diciembre del 2008.

Sin embargo, el informe tiene muchos detalles que restan brillo al declive del desempleo y plantean dudas sobre si la economía ha mejorado lo suficiente como para que la Fed comience a reducir sus compras de bonos en su próxima reunión de septiembre.

Parte de la caída en la tasa de desocupación se debió a un declive en el tamaño de la fuerza laboral estadounidense, que sólo incluye a personas que tienen empleos o que están buscando trabajo. La fuerza laboral puede reducirse cuando más trabajadores se jubilan o van a la escuela, pero también se contrae cuando la gente se da por vencida en la búsqueda de empleo.

Los estadounidenses también trabajaron en promedio semanas laborales más cortas en julio y los salarios por hora bajaron. Eso es un mal augurio para el futuro gasto del consumidor, que es el motor de la economía de Estados Unidos.

El Gobierno dijo también que en mayo y junio se crearon 26.000 empleos menos a lo estimado previamente.

La parte negativa del informe empleo ofreció direcciones a los inversionistas.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos cayeron con fuerza, lo que sugiere que los inversionistas están menos confiados en que la Fed pueda comenzar a reducir pronto las compras de deuda, que apuntan a impulsar el empleo. Las acciones estadounidenses también caían.

El banco central de Estados Unidos compra actualmente 85.000 millones de dólares mensuales en bonos para mantener bajos los costos de endeudamiento. El programa de estímulo ha ayudado al golpeado mercado inmobiliario y ha elevado las ventas de automóviles.

El presidente de la Fed, Ben Bernanke, dijo el mes pasado que el banco central estadounidense probablemente reducirá el nivel de compras mensuales a fin de año y que terminará con ellas a mediados del 2014.

El comité de política monetaria de la Fed terminó el miércoles una reunión de dos días sin hacer cambios al programa.

PREOCUPACIONES ESTRUCTURALES

Otros datos divulgados el viernes mostraron una leve aceleración de las presiones inflacionarias. La lectura de 12 meses del indicador de inflación subyacente del Departamento de Comercio subió a un 1,2 por ciento en junio desde un 1,1 por ciento un mes antes.

El Departamento de Comercio también dijo que los nuevos pedidos a las fábricas de Estados Unidos aumentaron un 1,5 por ciento en junio, mientras que las órdenes de mayo fueron revisadas para mostrar un incremento del 3,0 por ciento en vez del avance del 2,1 por ciento informado previamente.

Economistas consultados por Reuters pronosticaban que los nuevos pedidos recibidos por las fábricas habían aumentado un 2,3 por ciento en junio.

Algunos analistas observaron que aunque el mercado laboral parece lejos de estar saludable, julio aún marcó una mejoría lenta pero constante.

"Aunque julio mismo fue un poco decepcionante, la Fed mirará a la mejoría acumulativa", comentó Paul Ashworth, economista de Capital Economics en Toronto, quien consideró que la Fed aún se encamina a reducir sus esfuerzos de estímulo en septiembre.

Analistas se preguntan si el ritmo de creación de empleos puede ser sostenido ante el crecimiento económico menor a lo esperado.

El Producto Interno Bruto, una medición sobre la producción económica del país, creció a una tasa anual de sólo un 1,4 por ciento en la primera mitad del año, menos que el 2,5 por ciento visto en el mismo período del 2012.

La mayoría de los economistas prevé que el PIB se acelerará en la segunda mitad de este año, lo que haría más plausible que continúe la tendencia de las contrataciones actuales.

Pero el hecho de que la creación de empleo ha sido relativamente robusta pese a la producción débil, podría apuntar a una posibilidad perturbadora: quizás el potencial de crecimiento de la economía ha caído.

Eso podría significar que se necesita de una menor producción para crear empleos, pero que los ingresos podrían crecer a un ritmo más lento a largo plazo. La posibilidad de dicho cambio estructural preocupa a economistas e inversores.