Actualizado 06/12/2014 16:06

Desafiando las probabilidades, sonda que aterrizó en cometa llama a casa

Por Victoria Bryan

BERLÍN, 14 nov, 15 Nov. (Reuters/EP) -

- La misión de la primera sonda robótica que aterrizó en un cometa logró un hito el viernes, cuando la nave espacial llamó por radio a la Tierra para informar que taladró con éxito el cuerpo del cometa.

Científicos de la misión Rosetta de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) no sabían si la pequeña sonda que aterrizó en el cometa el miércoles tendría suficiente poder en su batería para realizar la llamada y transmitir sus hallazgos a la Tierra, a unos 500 millones de kilómetros de distancia.

La sonda de Rosetta, llamada Philae, no logró anclarse como estaba previsto en el cuerpo del cometa, lo que hizo que rebotara y aterrizara a un kilómetro de distancia de su blanco original.

Fotografías y otros datos transmitidos posteriormente por Philae indican que la sonda está atrapada en una zona sombría, lo que sugiere que se terminó en un acantilado o dentro de un cráter. Con el poder de la batería disminuyendo, los científicos enviaron órdenes a Philae para que intentara usar su taladro para obtener muestras del cuerpo del cometa.

Esos resultados aún están pendientes, pero el viernes Philae hizo una tardía llamada por radio a través de su nave nodriza Rosetta, reportando que el taladro operó con éxito.

"La primera perforación en un cometa en un hecho!" publicó ESA en la red social Twitter en la noche del viernes.

Los científicos también decidieron intentar reposicionar la sonda para que sus paneles solares pudieran recargarse.

"Comencé a levantarme un poco y ahora rotaré para intentar optimizar la energía solar", publicó ESA en la cuenta de Twitter de la sonda Philae.

Una de las tareas más importantes de la sonda de 100 kilogramos es obtener muestras desde dentro del cometa para análisis químicos.

Se cree que los cometas son restos puros de la formación de nuestro sistema solar hace unos 4.600 millones de años. Ellos contienen rocas y hielo que han preservado moléculas orgánicas antiguas como una cápsula de tiempo y podrían brindar luces sobre la evolución de los planetas y la vida.

El taladro de Philae descendió más de 25 centímetros el viernes, penetrando la superficie del cometa.