Por Gertrude Chavez-Dreyfuss
NUEVA YORK, 30 Ago. (Reuters/EP) -
- El dólar se apreció el viernes y alcanzó su máximo nivel en cuatro semanas frente a una cesta de principales monedas, impulsado por la persistente incertidumbre sobre Siria y un euro depreciado tras datos económicos débiles en la zona euro.
Aunque Gran Bretaña ha rechazado unirse a una acción militar contra Siria, Estados Unidos dijo que seguirá buscando una coalición internacional en ese ámbito, sugiriendo que, aunque no sea inminente, es probable que haya un ataque contra Damasco en algún momento.
El euro, en tanto, cayó a un mínimo nivel en dos semanas frente al dólar por datos que mostraron una inflación benigna y un elevado desempleo en la zona euro.
Datos económicos de Estados Unidos divulgados el viernes también fueron débiles, con excepción del índice de gerentes de compras (PMI) para el sector manufacturero de la región central del país, que registró un incremento de los precios pagados por insumos a su mayor nivel desde noviembre del 2012.
A media mañana, el índice dólar operaba a 82,062, tras alcanzar 82,092 más temprano, su mayor nivel en cuatro semanas.
El euro se depreciaba un 0,2 por ciento, a 1,3217 dólares, tocando su mínimo nivel en dos semanas de 1,3210 dólares.
La moneda común europea cayó desde niveles máximos después de que Eurostat dijo que la inflación anual a los precios del consumidor sería de 1,3 por ciento en agosto, menos que el 1,6 por ciento del mes previo. Y aunque la confianza empresarial subió, el desempleo permaneció alto, en un 12,1 por ciento.
Los inversores estarán cautelosos a la hora de comprar euros antes de la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo de la próxima semana.
Las autoridades del BCE probablemente reiterarán su promesa de que las tasas permanecerán bajas por algún tiempo en la medida en que la recuperación económica se consolida lentamente.
El dólar se debilitaba un 0,1 por ciento frente al yen, a 98,20 yenes, tras alcanzar un máximo nivel intradiario de 98,47 yenes. Operadores dijeron que la venta de dólares por parte de exportadores japoneses a fin de mes ayudaba a la divisa nipona.