Actualizado 14/09/2009 22:40

Enviado Honduras dice "fue echado" de sesión ONU

Por Robert Evans

GINEBRA (Reuters/EP) - El embajador de Honduras en Naciones Unidas dijo el lunes que había sido echado de una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, después de que otros países latinoamericanos señalaron que representaba a un régimen "ilegal".

Luego de un día de confusión que demoró el comienzo de la reunión de tres semanas del cuerpo de 47 naciones, el enviado J-Delmer Urbizo dejó la sala gritando en inglés y español:

"We will be back! Volveremos!"

Las dramáticas escenas se produjeron después de que Argentina, Brasil, México y Cuba insistieron en que Delmer Urbizo, que ocupa el puesto de embajador en Ginebra desde hace tres años, no podía quedarse a menos que fuera aprobado por el derrocado presidente Manuel Zelaya.

El presidente del Consejo de Derechos Humanos, el belga Alex Van Meuwen, dijo al enviado que no podía hablar en respuesta porque Honduras es sólo observador del foro y le pidió que se fuera mientras se evaluaban sus credenciales.

"Fui echado. Me han colocado guardias de seguridad para asegurarse de que me fuera", dijo Delmer Urbizo a periodistas rodeado de policías de la ONU. "Pero volveremos, no se confundan, y estas personas verán lo que han hecho".

El enviado dijo que él y otros diplomáticos de la misión hondureña en Ginebra -donde ha declarado su apoyo al presidente de facto Roberto Micheletti- volverán luego de las elecciones programadas para noviembre.

En la sala no hubo una delegación rival del Gobierno de Zelaya en el exilio, pero ningún país habló en defensa de Delmer Urbizo. La Asamblea General de la ONU pidió a sus miembros que no reconozcan al Gobierno de Micheletti, que tomó el poder con un golpe militar en junio.

EEUU 'NO MIRARA HACIA OTRO LADO'

Como resultado de la interrupción inicial, el discurso de apertura de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, tuvo que ser pospuesto.

En el texto del discurso, que se hizo público antes de la apertura, Pillay planteó que mujeres de todo el mundo sufren privaciones de las libertades fundamentales, sobre todo en los estados del Golfo Pérsico, Sudán y Afganistán.

"Los derechos de las mujeres siguen siendo restringidos en demasiados países", agregó en su discurso, citando una "reacción violenta contra los derechos de las mujeres" en las elecciones de Afganistán e instando a las autoridades del país a detener la violencia relacionada a la votación.

Además de lidiar con el tema de Honduras, el Consejo evaluará violaciones de los derechos humanos cometidas en todo el mundo, incluyendo las acusaciones de crímenes de guerra durante la invasión israelí de la Franja de Gaza en diciembre y enero.

Más adelante este mes se emitirá un importante reporte de la ONU sobre el ataque israelí, que ya ha sido condenado por grupos judíos.

Esta será la primera sesión del cuerpo de 47 estados en la cual una delegación estadounidense participa como miembro con poder de voto, luego de su elección en mayo.

Esther Brimmer, asistente de la Secretaría de Estado estadounidense, dijo al Consejo que Washington quiere focalizarse en las violaciones más allá de dónde ocurran o qué sensibilidades invoquen.

"Estados Unidos no mirará hacia otro lado frente a los graves abusos de los derechos humanos", dijo. "Pese a que vamos a buscar un consenso, vamos a decir las cosas cuando las veamos y vamos a defender nuestra posición cuando la verdad esté en riesgo".