Por Alan Baldwin
JEREZ, España, 27 ene, 27 Ene. (Reuters/EP) -
- Si la Fórmula Uno se encuentra al borde de lo desconocido, con nuevas tecnologías y motores muy distintos a los del año pasado, el inicio el martes de cuatro días de pruebas de pretemporada en la localidad española de Jerez debería al menos dar alguna pista sobre cómo será el futuro.
Los aficionados ya tienen una idea bastante clara del aspecto que van a tener los monoplazas, después de que en los últimos días la mayoría de las escuderías hayan realizado unas presentaciones en Internet cuidadosamente controladas.
Se han hecho comparaciones con osos hormigueros, pinzas de cangrejo y hasta delfines en las presentaciones de una gama diferente de propuestas de morros para afrontar las nuevas normas dictadas por la seguridad para bajar la parte delantera de los vehículos.
Mercedes, Toro Rosso y Force India han hecho ensayos privados con un límite de kilometraje para preparar sus nuevos coches para los entrenamientos de Jerez, pero hasta ahora nadie ha visto u oído a varios coches juntos en una pista.
Ese momento llegará el martes por la mañana, cuando 10 de las 11 escuderías encenderán sus motores en Jerez, creando una expectación y un interés inusitado en la F1 en varios años.
"Creo que cada persona en la F1 está sentada en el borde de lo desconocido", dijo la semana pasada el campeón del mundo de 2009, el británico Jenson Button.
El finlandés de Ferrari Kimi Raikkonen se hizo eco de las palabras del piloto de McLaren al día siguiente. "Es emocionante e inquietante a partes iguales".
La F1 ha abandonado los estridentes motores V8 de 2,4 litros, con su alarido que destrozaba los oídos, y los ha reemplazado por el V6 turbo de 1,6 litros con un sistema de recuperación de energía enormemente complejo.
El jefe de la F1, Bernie Ecclestone, ha mostrado su preocupación de que los aficionados que acudan a las carreras para disfrutar del sonido, y no solo de la vista, quedarán decepcionados.
SONIDO UNICO
El director técnico de Renault Sport, Rob White, está igual de ansioso que los demás, después de haber escuchado los motores de su equipo solo en simulaciones informáticas, pero está convencido de que sonará como música para los oídos.
"La presencia de un turbocargador y los sistemas que utilizamos para recuperar la energía y los tubos de escape reducirá la intensidad del sonido un poco respecto a lo que nos hemos acostumbrado", dijo White a Reuters.
"Pero hay cosas que son muy parecidas. La tecnología de la caja de cambios es parecida, los mismos cambios rápidos a los que nos hemos acostumbrado en estos últimos años. Creo que nos estamos dirigiendo a un sonido que será distinto al de la generación de V8. Ojalá será un sonido que nos guste escuchar".
Renault tendrá a tres de sus equipos en acción, y solo un Lotus inestable ha decidido saltarse unas pruebas consideradas cruciales, uno de las tres grandes ensayos previos al inicio de la temporada.
La fiabilidad sigue siendo la mayor preocupación, como ocurre con cualquier nueva tecnología llevada al límite.
Christian Horner, director de la escudería campeona, Red Bull, ha advertido que la fiabilidad y el consumo de combustible podrían ser tan imprecisas que solo la mitad de los pilotos podría acabar el primer gran premio del año, el 16 de marzo en Australia.
Los coches tendrán que terminar las carreras con 100 kilos de combustible, frente a los alrededor de 150 del año pasado, y los pilotos solo tendrán cinco motores para la temporada, en lugar de los ocho anteriores.
Si el año pasado toda la atención estuvo sobre la duración de las gomas, y Pirelli fue muy criticada por varios fallos, 2014 podría poner bajo el foco a los fabricantes de motores: Renault, Mercedes y Ferrari.
"Es una fina línea divisoria entre los resultados impredecibles, que suelen ser vistos como algo bueno en el deporte, y los que son tan caóticos que son difíciles de explicar", aseguró White.
(Traducido en la Redacción de Madrid, editado por Javier Leira)