BUENOS AIRES (Reuters/EP) - El Estado argentino decidió pagar unos 155 millones de dólares anuales para quedarse con los derechos de televisación del fútbol local, en una polémica medida que le dará el control del deporte más popular del país y ayudaría a varios clubes casi en quiebra.
El acuerdo, que implica una erogación de unos 600 millones de pesos al año, fue alcanzado con la poderosa Asociación del Fútbol Argentino (AFA), que la semana pasada anunció sorpresivamente que rompía una relación de 18 años con un grupo privado que le abonaba 289 millones de pesos anuales por los derechos de transmisión.
La ruptura del contrato con Televisión Satelital Codificada (TSC), que tenía vigencia hasta el 2014, fue leída por los analistas como un capítulo más en la pulseada que mantiene el Gobierno peronista con el grupo de medios Clarín, con una participación del 50 por ciento en el holding que tenía los derechos del fútbol.
Sin embargo, el Gobierno ha asegurado que la medida busca "democratizar" al fútbol, permitiendo la transmisión de sus partidos por canales abiertos. Sectores de la oposición han calificado el plan como un derroche de recursos públicos.
"(Seiscientos millones de pesos) es la cifra que dijo el presidente (de la AFA, Julio Grondona), por lo tanto es la que tenemos dar por cierta", dijo a una radio local Ernesto Cherquis Bialo, portavoz de la AFA, en referencia al acuerdo con el Estado.
La AFA había anunciado el martes que había llegado a un arreglo con el Gobierno para transmitir el fin de semana de forma gratuita y por señal abierta el campeonato local de fútbol, pero no había confirmado la cifra del nuevo trato.
El fútbol es el deporte más popular en Argentina, y los partidos de las ligas locales, incluso las de divisiones menores, son seguidas cada semana por millones de fanáticos.
Bialo expresó, sin embargo, que "el Estado no va a subvencionar al fútbol. El Estado va a hacer un negocio con el fútbol. De esa gestión, si está realizada con probidad y de alguna manera inteligente, el Estado va a ganar un dinero que le va a permitir redistribuir en otras áreas".
Versiones de prensa indicaron que el nuevo contrato que firmará la AFA, que autorizará a su contraparte a negociar los derechos de televisión del fútbol local, se haría con una sociedad del Estado argentino creada para ese fin.
La ruptura contractual expuso a la AFA, que busca mayores ingresos para sanear la economía de los clubes, a demandas millonarias.
El Gobierno de la presidenta Cristina Fernández, al igual que el de su antecesor y esposo, Néstor Kirchner (2003-2007), mantiene un abierto enfrentamiento con Clarín, al que acusa de realizar una cobertura a través de sus medios excesivamente crítica hacia su administración.
La crisis financiera de los clubes y el posterior conflicto entre AFA y TSC provocó una demora de una semana en el inicio del torneo local, que comenzará el próximo viernes.
En la tarde del miércoles se podrían conocer detalles del acuerdo entre AFA y el Estado.