Por Vicky Buffery
PARIS (Reuters/EP) - El gasto de los consumidores franceses en productos manufacturados cayó inesperadamente en mayo, según datos divulgados el martes que empañan los recientes indicios de mejoría en la segunda economía de la zona euro.
Los datos de la oficina nacional de estadísticas INSEE mostraron una caída mensual de 0,2 por ciento, muy por debajo de la mediana de los pronósticos sobre un alza del 0,2 por ciento.
INSEE también revisó a la baja los datos del mes pasado para un alza de 0,5 por ciento desde una lectura previa de 0,7 por ciento.
El consumo total para junio cayó en 1,6 por ciento frente al mismo período del año anterior.
El dato llega en el mismo día de la publicación de un sondeo de la INSEE que mostró una ligera alza en la confianza empresarial en junio, con una lectura de 75 frente a 73 puntos del mes pasado.
Otro sondeo a gerentes de compra también arrojó señales positivas, con un alza en el índice compuesto de actividad a 47,7 en junio desde 46,6 del mes anterior, con una desaceleración en la tasa de declive de los nuevos pedidos.
Pero después de otras señales más positivas sobre la economía francesa, los economistas dijeron que la caída en el gasto de los consumidores fue un recordatorio de que las condiciones siguen siendo muy inciertas y que cualquier recuperación es probable que sea prolongada y frágil.
"Estos aún son datos muy pobres. Francia está en medio de una recesión. Al comienzo esta era ampliamente basada en la industria y ahora está comenzando a deslizarse hacia los servicios y a los gastos familiares", dijo Alexander Law, economista de la consultora Xerfi, con sede en París.
El consumo familiar, que representan más de la mitad del Producto Interno Bruto (PIB) de Francia, se ha mantenido resistente desde el inicio de la crisis financiera global, ayudando al país a sobrellevar mejor el bajón que algunos de sus vecinos.
TIEMPOS INCIERTOS
El gobernador del Banco de Francia, Christian Noyer, dijo que existían indicios de una estabilización en Francia para fines de año.
Pero las cifras de gastos de mayo, que fueron impulsadas por un subsidio del Gobierno sobre los automóviles nuevos, sugieren que los consumidores finalmente están sucumbiendo al clima de incertidumbre desatado por el alza en el desempleo.
"Estamos viendo una tendencia importante donde lo único que se mantiene al alza en consumo son los automóviles", dijo Olivier Gasnier, economista de Societe Generale en París.
La tendencia fue claramente reflejada en los datos de gastos del martes, que mostraron una brusca caída mensual de 1,4 por ciento en las ventas de ropa y un declive del 0,8 por ciento en las ventas de productos electrónicos y en muebles.
Tan sólo la semana pasada, INSEE dijo que esperaba una reducción de 699.000 empleos en el sector privado a lo largo del 2009, lo que llevaría a la tasa de desempleo de Francia a 10,5 por ciento, su mayor nivel en una década.