Actualizado 07/09/2009 10:20

G.Bretaña presionará a Libia por compensación víctimas del IRA

Por Noah Barkin y Stefano Ambrogi

BERLIN/LONDRES (Reuters/EP) - El primer ministro británico, Gordon Brown, dijo el domingo que apoyará los reclamos de compensación contra Libia de los familiares de las víctimas del Ejército Republicano Irlandés (IRA por su sigla en inglés) que dicen que Trípoli ayudó a armar a la guerrilla.

Brown se vio obligado a clarificar apresuradamente su política cuando defensores de las familias de las víctimas lo acusaron de anteponer el comercio con Libia a la justicia, tras la publicación de documentos que sugirieron que temía poner en peligro la mejorada relación con el país del norte de Africa.

La oposición conservadora, a quien se pronostica vencedora en las elecciones generales de junio próximo, acusó a Brown de dar un giro de 180 grados y dijo que el primer ministro y el gobierno han perdido su brújula moral.

"Me preocupa extremadamente lo que le sucedió a aquellas personas que han sido víctimas del terrorismo del IRA", dijo Brown a reporteros tras reunirse con la canciller de Alemania, Angela Merkel, en Berlín.

"Designaremos a cargo funcionarios en la oficina de relaciones exteriores y en nuestra embajada en Trípoli que acompañarán a las familias y a sus representantes en reuniones con el Gobierno libio para negociar una compensación", agregó.

"Y la primera de estas reuniones será sostenida en las próximas semanas", aseguró Brown.

Las relaciones británicas con Libia están en el centro de la atención, tras la liberación el mes pasado de un agente libio condenado por el atentado con bomba a un avión en 1988 que estalló sobre Lockerbie y en el que 270 personas resultaron muertas.

Gran Bretaña niega haber presionado al gobierno escocés para que liberara a Abdel Basset al-Megrahi en un intento por mejorar las relaciones comerciales con Libia, país que cuenta con las más grandes reservas petroleras de Africa.

Las autoridades escocesas liberaron a Megrahi, enfermo terminal de cáncer de próstata, por razones humanitarias, provocando el enojo del gobierno de Estados Unidos y de los familiares de los 189 estadounidenses que murieron cuando el vuelo 103 de la aerolínea Pan Am explotó sobre Lockerbie.

La disputa respecto a los lazos con Libia, sumada a una creciente cifra de bajas en Afganistán, han significado un turbulento regreso al trabajo para Brown luego de sus vacaciones de verano.

Gran Bretaña atraviesa una recesión y el primer ministro sólo cuenta con pocos meses para mejorar sus mediciones en las encuestas antes de las elecciones.

El año pasado representantes de las víctimas del IRA se reunieron con Brown para buscar pagos en metálico del líder libio, Muammar Gaddafi, que según ellos habría enviado explosivos Semtex en las décadas de 1980 y 1990 para el grupo que luchaba por poner fin al control británico de Irlanda del Norte.

Abogados que representan a las familias de las víctimas tienen pruebas de que los explosivos plásticos fueron usados en una serie de ataques del IRA, según informó el diario Sunday Times.

Los abogados dijeron que la principal preocupación de Brown era no poner en riesgo los crecientes lazos comerciales con Trípoli y su apoyo a la guerra contra el terrorismo, una acusación fuertemente rechazada por la oficina del primer ministro.

La campaña para obtener acuerdos monetarios comenzó después de los acuerdos extrajudiciales a los que llegó Libia con tres víctimas estadounidenses de ataques del IRA.