Actualizado 26/08/2009 07:02

Gobierno mexicano tendría aliado en jefe diputados PRI

Por Miguel Angel Gutiérrez

MEXICO DF (Reuters/EP) - El Gobierno mexicano tendría un camino menos sinuoso para sus reformas en el Congreso con el nuevo jefe de los diputados del opositor PRI, un hombre proclive a apoyar iniciativas oficialistas que va a tener que mediar entre copartidarios moderados y recalcitrantes.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) -la primera fuerza de la cámara baja a partir de septiembre- eligió el martes como coordinador de sus diputados a Francisco Rojas, quien en el 2003 apoyó una reforma fiscal del oficialismo.

"Es un hombre muy responsable, muy razonable y podemos llegar con él a muchos acuerdos", dijo José Trejo, legislador oficialista que preside la Comisión de Hacienda del Senado.

Pero aunque es positiva para el Gobierno, la elección de Rojas, un ex director de la petrolera estatal Pemex, no garantiza el apoyo incondicional a los cambios fiscales que planea el presidente Felipe Calderón, según analistas.

México pasa por su peor recesión económica en casi 15 años por la crisis desatada en Estados Unidos, un socio comercial clave, mientras es presionado para subir su recaudación fiscal y evitar una baja en su calificación de deuda soberana.

El Gobierno, que enviará al Congreso en septiembre un plan fiscal con el presupuesto del 2010, necesita reformas para amortiguar la crisis, que arrastraría la economía a una caída de hasta el 7.5 por ciento este año, según el banco central.

"Rojas puede tener una posición personal, quizá favorable a algunas de las reformas de Calderón, pero no creo que (un eventual apoyo) lo haga por decisión propia", dijo el analista José Antonio Crespo, investigador del privado CIDE.

"En realidad las negociaciones van a ser con los jefes de los diputados, que son los gobernadores" y líderes del PRI, agregó Crespo.

TODO DEPENDE DE PROPUESTA

El apoyo del PRI a un proyecto fiscal dependerá si las reformas incluyen propuestas antipopulares que puedan comprometer sus oportunidades de regresar al poder en las elecciones presidenciales del 2012.

Rojas, elegido en una votación de los 237 diputados electos del PRI, llegó a apoyar como diputado el punto más polémico e impopular de la iniciativa fiscal del 2003, que era extender el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a alimentos y medicinas.

Pero la iniciativa entonces fracasó por el rechazo del ala dura del PRI.

"Ofrecemos a todos nuestros pares de las otras fracciones parlamentarias un trato digno y respetuoso, de tal manera que podamos buscar juntos coincidencias, acuerdos, para que podamos ir librando la crisis en la que estamos atorados todos en el país", dijo Rojas la noche del martes en rueda de prensa.

De todos modos, observadores creen que este año habrá una reforma fiscal menos profunda porque implicaría costos políticos tanto para el oficialismo como para la oposición.

Algunos analistas han dicho que el partido opositor ayudaría a Calderón a aprobar algunos elementos de una reforma fiscal y un moderado déficit presupuestario, lo que sería suficiente para evitar una baja en la calificación soberana.

En los comicios legislativos de julio, el PRI desbancó al partido de Calderón como primera fuerza en la cámara baja y se convirtió en clave para las negociaciones con el Gobierno.

El PRI en la nueva legislatura, que comenzará a sesionar el 1 de septiembre, tendrá un ojo en las reformas y otro en el horizonte de las elecciones del 2012, en las que podría ser un fuerte candidato a recuperar la presidencia.

"Entre más se acerquen las elecciones, más precandidatos a la presidencia van aparecer y más proclive va a estar el grupo parlamentario del PRI a estar dividido", dijo Fernando Dworak, investigador del Centro de Estudios Espinosa Yglesias.

"Y ello va a afectar el avance de las reformas", agregó.

Calderón -que asumió en el 2006- logró algunas reformas en el Congreso, aunque no tan ambiciosas como las que buscaba, como la energética, la fiscal y la del sistema de pensiones.