Por Keith Weir y Allyn Fisher-Ilan
LONDRES (Reuters/EP) - Gran Bretaña e Israel advirtieron a Irán el martes que podría recibir duras sanciones de la comunidad internacional si no coopera en su disputado programa nuclear.
Se prevé que Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Alemania pidan a Rusia y China en las conversaciones del 2 de septiembre que consideren imponer una cuarta ronda de sanciones de la ONU, posiblemente contra el sector petrolero iraní, si Teherán no acepta las negociaciones por su programa.
"Si no hay un progreso inmediato, creo que el mundo deberá considerar imponer sanciones a Irán como un tema prioritario", dijo el primer ministro británico, Gordon Brown, en una rueda de prensa en Londres junto a su par israelí, Benjamin Netanyahu.
Estados Unidos y sus aliados, incluyendo Gran Bretaña, acusan a la república islámica de intentar desarrollar armas atómicas, pero Teherán sostiene que sólo quiere fabricar tecnología nuclear para generar electricidad.
Cuando le preguntaron sobre la posibilidad de que Irán desarrolle armas nucleares, Netanyahu dijo: "Se está acabando el tiempo, es tarde, pero no demasiado tarde".
"Si la resolución de los miembros responsables de la comunidad internacional es fuerte y firme, no importa cuan tarde sea, el futuro puede ser asegurado y esa es nuestra preferencia", añadió Netanyahu.
El primer ministro israelí dijo que la disputada elección de junio demostró que el Gobierno de Teherán no tiene el apoyo del pueblo iraní y es "mucho más débil de lo que parece".
Se cree que Israel es único país de Oriente Medio que tiene un arsenal nuclear. El Estado judío dice que una bomba iraní es una amenaza a su existencia que no será tolerada.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha impuesto tres rondas de sanciones a la república islámica, en diciembre del 2006, marzo del 2007 y marzo del 2008, contra compañías e individuos iraníes ligados al programa nuclear.
Los funcionarios iraníes se han negado repetidas veces a limitar su programa nuclear pese a la amenaza de sanciones.
La Agencia Internacional de Energía Atómica tiene previsto emitir esta semana un reporte sobre Irán, que previsiblemente tendrá una fuerte influencia en la respuesta de la comunidad internacional.
Las relaciones entre Gran Bretaña e Irán se deterioraron luego de la elección presidencial iraní. Brown acusó a Teherán de "represión y brutalidad" al aplastar las protestas contra la reelección del mandatario de línea dura Mahmoud Ahmadinejad.