Actualizado 24/06/2014 22:54

"Holdouts" discutirían arreglo con Argentina para evitar cese de pagos si avanza negociación

Por Daniel Bases

NUEVA YORK, 24 jun, 24 Jun. (Reuters/EP) -

- Inversores que tienen bonos impagos de Argentina, conocidos como holdouts, dijeron el martes que discutirían un arreglo con el Gobierno del país para que pague a otros acreedores y evite caer en una cesación de pagos, si es que las negociaciones para resolver la disputa legal avanzan antes del 30 de julio.

Abogados que representan a fondos de cobertura con deuda no reestructurada, liderados por Elliott Management de NML Capital Ltd y Aurelius Capital Management, dijeron también en una carta al juez federal Thomas Griesa que no había motivos para acceder a un pedido de Argentina para suspender su decisión de que pague a los acreedores.

El lunes vence un pago por bonos de 900 millones de dólares a inversores que participaron de dos reestructuraciones anteriores en 2005 y 2010. Argentina tiene un período de gracia de 30 días para realizar el pago antes de ser declarada en 'default' o cesación de pagos.

"Si al acercarse el 30 de julio ambas partes han logrado buenos avances pero se necesita más tiempo, y Argentina no ha intentado evadir las órdenes modificadas del 23 de febrero, tanto Argentina como los demandantes tendrán una motivación para trabajar en un acuerdo consensuado, bajo condiciones favorables para ambos", dijo Robert Cohen del bufete Dechert, representante legal de los fondos, en una carta a Griesa.

Según Cohen, esto permitiría que el proceso de búsqueda de un acuerdo continúe y que Argentina pueda realizar el pago a acreedores dentro del período de gracia, al mismo tiempo que da a sus representados protección y una compensación por el riesgo de que fracase el esfuerzo de llegar a un acuerdo tras el pago.

Los abogados de Argentina habían pedido el lunes a Griesa la suspensión temporal de su decisión, la que obliga al país a cancelar su deuda con los 'holdouts' al mismo tiempo que realiza el pago de su deuda reestructurada, o impide hacer pagos, lo que generaría un 'default' técnico, pese a que Buenos Aires tiene los fondos necesarios.

La decisión de Griesa se ratificó luego que la Corte Suprema de Estados Unidos rechazó el 16 de junio escuchar una apelación de Argentina por la deuda con los fondos de cobertura.

Los demandantes, que mantiene su disputa con Argentina en las cortes neoyorquinas, obtuvieron en 2012 un fallo a su favor por 1.330 millones de dólares. En la carta enviada a Griesa, dicen que, con los intereses acumulados, la cifra se elevaría a cerca de 1.650 millones de dólares al 30 de junio.

Argentina sostiene que si cancela la deuda a los tenedores de bonos impagos tendría que enfrentar reclamos por hasta 15.000 millones de dólares de otros acreedores no reestructurados.

La cifra representa más de la mitad de las reservas de divisas del Gobierno argentino, que suman cerca de 28.500 millones de dólares.

Sin embargo, analistas privados dicen que la estimación de 15.000 millones de dólares es muy elevada.

Cerca del 93 por ciento de los acreedores, de unos 100.000 millones de dólares en bonos de deuda soberana que Argentina dejó de pagar entre 2001 y 2002, aceptaron la reestructuración por menos de un tercio del valor original de los bonos.