El secretario general iberoamericano dice que España y las empresas españoles hibieron "bien" en "apostar por América Latina"
MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El director del Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), Javier Santiso, destacó este miércoles "la capacidad de resistencia" de Latinoamericana a la crisis económica y financiera global, pero admitió la necesidad de que el continente iberoamericano aborde "reformas estructurales" en el futuro.
Al presentar el III informe de la OCDE sobre las 'Perspectivas Económicas de América Latina 2010', Santiso reconoció que a pesar de "la capacidad de resistencia de la región" frente a la crisis, ésta sí está teniendo "un impacto" en los países, especialmente en cuanto al volumen de remesas que reciben y que para algunos países de la región llegan a representar hasta el 10 por ciento de su Producto Interior Bruto y el 33 por ciento en el caso de otros como Haití.
En el informe, la OCDE pone de relieve la necesidad de impulsar "propuestas concretas" para garantizar, por ejemplo, "la portabilidad de las pensiones" si las personas desplazan su residencia al extranjero, dado que sólo del 15 por ciento de los inmigrantes latinoamericanos están cubiertos actualmente por acuerdos bilaterales en materia de seguridad social.
Santiso consideró que "España es un ejemplo de buenas prácticas" en este ámbito dado que "prácticamente" tiene acuerdos suscritos en esta materia con todos los países de la región y, asimismo, consideró "muy importante" que países como Estados Unidos, un importante receptor de inmigrantes de la región, también suscribiera un acuerdo similar.
Por su parte, el secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo De Laiglesia, consideró que la entrada en vigor en los próximos días del Convenio Multilateral Iberoamericano de Seguridad Social para extender la cobertura de los inmigrantes constituye "un paso de importancia capital".
Al abordar la importancia de las remesas para la región, Santiso subrayó la necesidad de "bucar mecanismos para reducir estos costes" de envío y precisó que una reducción del 1 por ciento de los costes permitiría generar un flujo monetario de hasta 800 millones de dólares.
El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, admitió de que aunque, en términos económicos, "América Latina va a mejor" y ya se perciben "brotes verdes" que apuntan al inicio de la recuperación a nivel mundial, resulta "preocupante" el hecho de que "la confianza todavía no está consolidada", así como el hecho de que el año pasado el comercio se redujo un 30 por ciento.
Iglesias defendió la necesidad de que América Latina busque financiación en Asia al considerar que este siglo es sin duda el de Asia y entrar en los mercados asiáticos, instó también a las economías del continente a impulsar "un nuevo modelo de negocios" y prestar atención a "la productividad de las pymes" y subrayó la necesidad de que haya "más políticas públicas" para "organizar la salida de la crisis".
Asimismo, subrayó la necesidad de impulsar una mayor integración en el continente latinoamericano, al tiempo que reconoció que lo "poquito" que se ha hecho en este ámbito, en comparación con lo que se podía haber hecho en los últimos 50 años, constituye "una gran frustración". En este sentido, admitió que impulsar "un modelo de integración propio" en el continente constituye "un gran desafío" para la región.
EL INFORME
El informe de la OCDE, presentado este lunes en Estoril (Portugal) durante la Cumbre Iberoamericana, alude a la necesidad de garantizar un "acceso legal y flexible al mercado laboral" de los países de destino para los inmigrantes latinoamericanos; la necesidad de "extender la protección social" de los inmigrantes; determinar cómo garantizar que los beneficios de las remesas tienen un impacto en ámbitos como la educación en el continente y cómo reducir los costes del envío de las remesas.
Advierte de que 39 millones de iberoamericanos podrían caer nuevamente en la pobreza como consecuencia de la crisis económica y reclamó a los gobiernos de estos países que conviertan en "aliados estratégicos" a los más de 20 millones de migrantes que hay repartidos por el mundo.
Refleja que el PIB de la región se contraerá entre un 1,5 y un 1,9% este año, a pesar de "algunos signos alentadores que apuntan hacia una recuperación anticipada del crecimiento en la región, el repunte será más bien moderado el año próximo".
Como consecuencia de la crisis, según datos de la CEPAL y la OIT, "la tasa de desempleo probablemente alcanzará el 8,5% de la población económicamente activa en 2009" y "la pobreza está volviendo a crecer". "La pobreza en América Latina podría crecer 7 puntos porcentuales para finales de 2010", lo que significaría, según Gurría, que "aproximadamente 39 millones de personas volverían a caer por debajo de los umbrales de la pobreza", que se sumarían a los 189 actuales.
Así pues, 2010 "será crítico" para el continente que se enfrenta sobre todo a tres desafíos en los próximos años: "la consolidación de la apertura económica, la vigilancia de la sustentabilidad fiscal, y el fortalecimiento de los apoyos a los migrantes para convertirlos en aliados estratégicos del desarrollo".
PAPEL DE ESPAÑA EN LA REGIÓN
La embajadora de España ante la OCDE y ex ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, subrayó "la atención creciente en esta región" por parte del organismo multilateral, gracias al apoyo entre otros factores de España y México, únicos miembros de la OCDE de la comunidad iberoamericana, a los que, no obstante, se sumará Chile "en muy pocos días" tras haber completado su proceso de adhesión a la OCDE, mientras que Saltiso precisó que Costa Rica, Perú y República Dominicana se incorporarán al comité de dirección del Centro de Desarrollo de la OCDE con "el mismo peso" en la toma de decisiones.
Asimismo, Narbona adelantó que la OCDE va a "profundizar su trabajo" en la región para contribuir a promover políticas de integración en materia fiscal, políticas de inversión y en aspectos como la gobernanza pública en los países de la región, con una especial atención a la gestión del agua.
Por otra parte, destacó que la OCDE tiene "una visión muy favorable" de la política de inmigración que practica España al defender "una inmigración legal, vinculada al mercado de trabajo y que genere derechos y obligaciones" para los inmigrantes, de manera que la inmigración se convierta en "una palaca económica" tanto para los países de origen como de destino. Por todo ello, Narbona consideró que España se convierte en "un referente" en materia de integración de la inmigración.
Por su parte, Santiso subrayó el papel tanto del Gobierno como de las empresas españolas presentes en Latinoamérica a la hora de "estructurar" las relaciones entre el continente y el exterior. "España sigue impulsando esta penetración, esta interacción con y para la región", aseguró.
El secretario general iberoamericano consideró que "España y las empresas españolas han hecho muy bien en apostar por América Latina" dada su "enorme potencialidad".
De Laiglesia aseguró que el Gobierno español está comprometido a "contribuir a esa política de acercamiento" hacia América Latina mediante un "apoyo activo" y, en este sentido, subrayó el objetivo del Gobierno de "abrir una nueva etapa de relaciones entre la Unión Europea y Mercosur" con la firma de un acuerdo de asociación durante la presidencia española de la UE, que arranca el 1 de enero.
Asimismo, destacó el compromiso de los líderes iberoamericanos reunidos estos días en la XIX Cumbre Iberoamericana en Estoril al apoyar la idea de que la "innovación como herramienta fundamental para salir de la crisis".