Actualizado 21/10/2007 19:28

Iberoamérica/UE.- Los países centroamericanos y la UE comienzan mañana negociacaciones en Costa Rica


SAN JOSÉ (COSTA RICA), 21 Oct. (EP/AP) -

Los países centroamericanos y la Unión Europea, (UE), inician mañana en San José la primera ronda para un acuerdo de asociación política, de cooperación y comercial, un proceso en el cual aflorarían los viejos reclamos a la UE por las restricciones en el tema del banano.

La ronda se extenderá hasta el viernes y los centroamericanos esperan que el primer encuentro sirva para conocer las aspiraciones europeas sobre el acuerdo, fijar una metodología de trabajo y familiarizar a los negociadores de ambas partes.

"Permitirá generar una discusión conceptual sobre las perspectivas de ambas regiones en relación con los componentes de este acuerdo", señaló el negociador costarricense Roberto Echandi.

Aún no hay una fecha precisa para el final de las negociaciones, aunque se espera que terminen antes de mayo del 2008 cuando los presidentes de Latinoamérica y Europa celebren una cumbre en Lima, Perú.

Costa Rica, Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua son los protagonistas centroamericanos, mientras que Panamá sólo podrá actuar como observador debido a que aún no se ha adherido al Sistema de Integración Centroamericana.

Los expertos estiman que las negociaciones no tendrían inconvenientes en los temas políticos y de cooperación, aunque consideran que las dificultades podrían aflorar en los esfuerzos por crear una zona de libre comercio.

La UE estableció desde hace buen tiempo un Sistema Generalizado de Preferencias mediante el cual muchos productos centroamericanos ingresan en ese mercado sin pagar aranceles o con aranceles preferenciales.

Pero funcionarios de comercio de la región señalan que ese sistema tiene sus limitaciones en términos de su cobertura y permanencia de tiempo, por lo cual propugnan por un acuerdo de libre comercio.

En ese camino podría surgir como una piedra en el zapato el añejo conflicto por el comercio del banano, el segundo producto de exportación centroamericano a la UE, después del café.

La UE estableció desde enero un arancel de 176 euros por cada tonelada de esta fruta latinoamericana, una medida que irrita a los productores de la zona que se quejan desde hace décadas por las políticas restrictivas europeas.