MADRID, 2 oct, 2 Oct. (Reuters/EP) -
- La bolsa española optaba el miércoles en la apertura por la toma de beneficios tras registrar la víspera máximos de hace más de dos años, con los inversores optando por la cautela pendientes del BCE, del apagón del gobierno federal de Estados Unidos y de la inestabilidad política Italia.
Miembros destacados del partido del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi dijeron que la formación política debería respaldar al Gobierno de Enrico Letta en un previsible voto de confianza el miércoles.
En Estados Unidos, aunque el mercado parecía minimizar los efectos del cierre parcial del Gobierno, las miradas se empezaban a centrar en las negociaciones sobre el techo de deuda con el límite a mediados de octubre.
Entre las referencias macroeconómicas de la jornada, una vez conocido el desempleo en España en septiembre -que aunque subió confirmó un comportamiento menos negativo del mercado laboral-, los inversores esperan la reunión del Banco Central Europeo y dato de empleo ADP en Estados Unidos.
"En Europa no se esperan cambios en lo que a los tipos de interés se refiere, pero la clave será saber si (el presidente del BCE Mario) Draghi dará alguna pista sobre un hipotético tercer LTRO (barra de liquidez a bancos privados) (...) Si lo hiciera, daría un nuevo soporte a las bolsas", dijeron analistas de Bankinter.
En este contexto, el diferencial de la deuda española a 10 años frente a su equivalente alemán subía ligeramente a las 9.33 hora local hasta los 246 puntos básicos (pb) desde los 242 pb de las últimas transacciones del martes.
El Ibex cotizaba a la misma hora con una caída de un 0,57 por ciento, a 9.291,1 puntos, mientras que el paneuropeo FTSEurofirst cedía un 0,72 por ciento.
Entre los principales valores se imponían las recogidas de beneficios tras los importantes avances del martes, con los grandes bancos Santander y BBVA cediendo un 0,83 y un 0,99 por ciento, respectivamente.
Popular era el peor valor del selectivo cayendo un 1,7 por ciento tras su anuncio la víspera de una emisión de bonos perpetuos por importe de 500 millones de euros que además computarán como capital Tier-1.
Olli Rehn, el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, se mostró confiado de que España está en condiciones de cerrar el programa de rescate bancario sin ningún tipo de medida de acompañamiento, aunque advirtió que sin la reactivación del crédito no habrá recuperación económica.
Otros 'blue chips' como Repsol e Iberdrola caían un 1,08 y un 0,7 por ciento, respectivamente, mientras que Inditex cedía un 1,3 por ciento.
Telefónica iba contracorriente y avanzaba un 0,3 por ciento.
Las constructoras Sacyr y ACS, que destacaron la víspera por su buen comportamiento, corregían parte de esos avances en las primeras operaciones, con la primera cediendo un 0,56 por ciento y la segunda perdiendo un 1,48 por ciento.
(Información de Blanca Rodríguez en la Redacción de Madrid; Editado por Ricardo Figueroa)