Publicado 26/12/2014 05:10

Inflación en Japón se desacelera y producción cae, mantiene a BOJ bajo presión

Por Leika Kihara y Tetsushi Kajimoto

TOKIO, 26 dic, 26 Dic. (Reuters/EP) -

- La inflación subyacente anual al consumidor de Japón se desaceleró por cuarto mes consecutivo en noviembre, debido en gran parte a los menores precios del petróleo, poniendo de relieve los desafíos que enfrenta el banco central en el logro de su objetivo de inflación del 2 por ciento.

La producción industrial cayó inesperadamente y los salarios reales marcaron su mayor caída en cinco años, lo que subraya la fragilidad de la recuperación y asesta un golpe a las políticas de estímulo del primer ministro Shinzo Abe encaminadas a sacar a la economía de estancamiento.

El índice subyacente de precios al consumidor (IPC), que excluye los precios volátiles de los alimentos frescos pero incluye a los productos del petróleo, subió un 2,7 por ciento interanual en noviembre, mostraron el viernes datos del gobierno, coincidiendo con la mediana de los pronósticos del mercado.

Excluyendo los efectos del alza del impuesto a las ventas en abril, la inflación fue de un 0,7 por ciento, desacelerándose desde el 0,9 por ciento de octubre y alejándose de la meta del BOJ de un 2 por ciento.

"Mientras que la economía se está recuperando, la caída de los precios del petróleo y la desaceleración de la inflación forzarán el Banco de Japón a flexibilizar la política aún más en algún momento del próximo año", dijo Hiroshi Watanabe, economista senior de SMBC Nikko Securities.

La economía de Japón entró en recesión a raíz del aumento de impuestos de abril, aunque los analistas esperan que el crecimiento repunte en el trimestre actual debido a un aumento de las exportaciones y de la producción.

La producción industrial cayó un 0,6 por ciento en noviembre, después de dos meses consecutivos de subidas, principalmente por el efecto de artículos de gran valor, como equipos de fabricación de chips para computadoras, confundiendo al mercado que esperaba un aumento del 0,8 por ciento.

En un rayo de esperanza, sin embargo, los fabricantes consultados por el gobierno esperan que la producción aumente un 3,2 por ciento en diciembre y crezca un 5,7 por ciento en enero.

El ministro de Economía, Akira Amari, dijo a periodistas que la caída en noviembre fue probablemente un bache temporal, dado el fuerte incremento previsto para los próximos meses.

El gobernador del Banco de Japón (BOJ), Haruhiko Kuroda, destacó la semana pasada que Japón estaba en camino de alcanzar la meta de precios, saliendo al paso a la especulación de que una reciente caída en los precios del petróleo podría pesar sobre los precios al consumidor y obligarlo a flexibilizar la política de nuevo a principios del próximo año.

Pero muchos analistas siguen dudando de que el Banco de Japón pueda cumplir su promesa de aceleración de la inflación al 2 por ciento en el próximo año fiscal, que comienza en abril de 2015.

Como reflejo de la recuperación, la disponibilidad de empleos alcanzó un máximo de 22 años y el número de trabajadores a tiempo parcial superó los 20 millones por primera vez desde que se dispone de datos en 1984.

Pero las empresas se mantuvieron reacias a aumentar los salarios, una mala señal para el consumo. El gasto de los hogares cayó un 2,5 por ciento en el año hasta noviembre, frente a una previsión del mercado de un declive del 3,8 por ciento.