Actualizado 03/09/2009 20:35

Irán aprueba ministros, se concentra en tema nuclear

Por Fredrik Dahl y Reza Derakhshi

TEHERAN (Reuters/EP) - El parlamento iraní aprobó el jueves a la mayoría de los ministros nominados por el presidente, Mahmoud Ahmadinejad, incluyendo a la primera mujer ministra, con lo que reafirma su mandato mientras lidia con una disputa internacional por el programa nuclear del país.

Además de la aprobación de la ministra, el parlamento respaldó a un novato como responsable de la cartera de Petróleo, y nombró titular de Defensa a un hombre reclamado por la justicia argentina acusado de participar en un ataque contra una mutual judía en 1994.

"Todos aquellos que actúan en contra de Irán enfrentarán el puño de hierro del Gobierno iraní, la nación y las fuerzas armadas", expresó el nuevo ministro de Defensa, Ahmad Vahidi.

Su nominación en el cargo fue condenada por Argentina porque lo acusa de estar involucrado en el ataque con bomba a un centro judío de Buenos Aires en 1994, que causó la muerte de 85 personas. Teherán ha negado en repetidas ocasiones cualquier vínculo con la agresión.

"Muerte a Israel", coreaban los legisladores después de que Vahidi recibiera 227 votos, alcanzando una mayor aprobación que el resto de los nominados.

Los diputados rechazaron a tres de los 21 ministros de gabinete propuestos por el mandatario de línea dura después de su controvertida reelección en junio, anunció el presidente de la cámara legislativa.

El resultado de la votación supone un revés limitado para el presidente ultraconservador, quien también vio en el 2005 cómo el parlamento rechazaba a cuatro de sus primeros candidatos.

Su nuevo Gobierno mantendrá su primera reunión el domingo, reportó la radio estatal.

"Ahmadinejad es capaz de tener un gabinete que está funcionando y hacer lo que quiere poner en práctica", comentó Baqer Moin, analista de Irán con base en Londres. "La pregunta clave es hasta qué punto la oposición va a permanecer tranquila", apuntó.

El resultado de la elección presidencial, que provocó masivas protestas de la oposición, llevó a Irán a la crisis interna más grande del país desde la Revolución Islámica de 1979. Además expuso crecientes divisiones dentro de la clase dirigente y relaciones más tensas con Occidente.

La asamblea legislativa está dominada por conservadores, pero algunos de los partidarios de Ahmadinejad lo han abandonado desde la elección.

La oposición moderada dice que la elección fue manipulada a favor del presidente y que el nuevo Gobierno es ilegítimo. Sin embargo, las autoridades niegan que la votación realizada el 12 de junio haya sido fraudulenta.

"NUEVA ERA"

Pese a los rechazos, resultó crucial para Ahmadinejad que entre los aprobados estén los ministros de Petróleo, Defensa, Inteligencia, Interior, Economía y Exteriores.

Los tres candidatos rechazados fueron los propuestos para las carteras de Energía, Asuntos Sociales y Educación, incluyendo a dos de tres mujeres que habían sido nominadas.

"Una nueva era de cooperación constructiva entre el parlamento y el gobierno comenzó hoy", dijo Ahmadinejad según citaron medios oficiales poco antes de que el resultado de la votación en el parlamento fuera anunciada.

Ahmadinejad ya ha señalado políticas exteriores más severas, después de que Teherán acusara a sus enemigos occidentales de alentar los disturbios posteriores a las elecciones. La oposición asegura que 72 personas murieron por la violencia, más del doble de lo reconocido por autoridades.

El designado ministro del Petróleo, Massoud Mirkazemi, fue quien recibió el menor número de votos de aprobación, 147. Irán es el quinto exportador mundial de petróleo y las ventas de crudo representan la principal fuente de ingresos del estado.

De las tres aspirantes mujeres, sólo la de Sanidad, Marzieh Vahid-Dastjerdi, obtuvo el respaldo necesario, convirtiéndose así en la primera mujer ministra en la república islámica.

Ahmadinejad tiene tres meses para proponer nuevos candidatos que sustituyan a los rechazados por el cuerpo legislativo, pero el gabinete ya puede empezar a trabajar.

A pesar de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio plazo hasta septiembre para que Irán retome los diálogos a seis bandas sobre comercio con la condición de que detenga el enriquecimiento de uranio, Ahmadinejad desestimó cualquier amenaza de mayores sanciones contra el país.

"Nadie puede seguir imponiendo sanciones sobre Irán", dijo a reporteros desde el parlamento, de acuerdo a información de la agencia de noticias IRNA.