Publicado 20/02/2014 21:20

JUEGOS-¿Quién pagará los platos rotos cuando se terminen los Olímpicos de Sochi?

Por Elizabeth Piper

MOSCU, 20 feb, 20 Feb. (Reuters/EP) -

- A días de la ceremonia de clausura del domingo, los contratistas y empresarios que invirtieron en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi trabajan para conseguir que las cuentas cuadren, antes de que el presidente Vladimir Putin lance una auditoría para guardar las apariencias.

Luego de meses de críticas por el costo récord de los Juegos y acusaciones de fraude, Putin ha señalado que los reporte sobre corrupción, despilfarro o abuso de fondos serán investigados tras la competición, si es que hay pruebas.

"Se ha invertido una gran suma de dinero. Ahora no es momento de discutir si valía la pena o si los precios estaban inflados. Permitan a los cuerpos supervisores manejar eso", dijo Putin a las autoridades de Sochi tras el inicio de los Juegos.

Pero en vez de señalar a empresarios que construyeron los relucientes estadios, hoteles, costosas vías de tren y hasta las pistas de esquí, muchos rusos piensan que es más probable que busque culpables entre funcionaros locales y de bajo rango.

De esta manera, dicen los analistas políticos, Putin podrá satisfacer las peticiones de la población de que haya castigos, pero minimizará el fracaso político.

Sochi ha pasado por un lavado de cara que ha llevado a la localidad turística de la época soviética al siglo XXI.

Elegantes hoteles de cristal y acero en la ribera del mar Negro se imponen sobre el renovado puerto en el centro de Sochi, donde hay enormes cruceros atracados desde el inicio de los Juegos el 7 de febrero.

Pero un poco más allá, la ciudad está salpicada de esqueletos de bloques de apartamentos sin terminar, mientras a lo largo de la vía del tren hay numerosos edificios abandonados.

Pero Putin no estaba impresionado.

"No creo que (Sochi) esté ahora mucho mejor. De hecho, justo lo contrario. Cuando la gente habla dicen '¿Cuando pararán de construir caóticamente y sin sentido en la ciudad?'", dijo.

Cuando el diputado regional Mikhail Milenin trató de defender el estado de la ciudad, Putin acusó a los funcionarios de fallar a la hora de parar el caótico desarrollo y concluyó: "No han hecho nada".

El costo de celebrar los Juegos y construir la infraestructura llegaría a 51.000 millones de dólares, pero un informe de la oposición conocido el año pasado sugería que, de esa cifra, unos 30.000 millones se han robado o perdido.

Pero en un país donde el éxito en los negocios y la política depende de las conexiones personales, la amenaza de acusaciones e investigaciones ha llevado a la especulación sobre si se buscará un chivo expiatorio de alto nivel cuando se cierre el telón de los Juegos el 23 de febrero.

Algunas de las especulaciones de la prensa apuntan al primer ministro Dmitry Medvedev, no por su papel en la preparación de los Juegos, sino porque se le ve como un probable sacrificio para Putin cuando las cosas empiecen a ir mal.

De los oligarcas que han ayudado a Putin con los Juegos, el jefe de la compañía ferroviaria Russian Railways, Vladimir Yakunin, es visto como el más vulnerable tras las críticas por el alto costo de la línea de tren construida desde Sochi a Krasnaya Polyana, en las montañas del Cáucaso.

El precio estimado de 8.000 millones de dólares por 50 kilómetros de ampliación de las vías ha asombrado a mucha gente.