Actualizado 22/08/2009 02:52

Karzai y rival reclaman victoria en votación afgana

Por Sayed Salahuddin y Jonathon Burch

KABUL (Reuters/EP) - El jefe de campaña del presidente Hamid Karzai y el principal candidato opositor se adjudicaron el viernes la victoria en la elección presidencial de Afganistán, pero el enviado de Washington llamó a los candidatos a que no declaren prematuramente un triunfo.

Ambos bandos sostuvieron que los conteos no oficiales hechos por sus voluntarios de campaña indican que obtuvieron suficientes votos en la elección del jueves, que se llevó a cabo a pesar de las amenazas de violencia hechas por los talibanes, por lo que no hay necesidad de una segunda vuelta en octubre.

La elección es una prueba mayor tanto para Karzai, tras ocho años en el poder, como para la estrategia regional del presidente de EEUU, Barack Obama, para vencer a los talibanes y estabilizar Afganistán.

El jefe de campaña de Karzai, Deen Mohammad, anunció que los primeros resultados mostraban que Karzai había logrado la mayoría. "No iremos a una segunda vuelta", dijo a Reuters.

Abdullah, el ex ministro de Relaciones Exteriores de Karzai, rechazó la declaración de victoria del bando oficialista y dijo que los resultados preliminares muestran que él va encaminado a ganar en la primera ronda, en la votación que se realizó el jueves, a pesar de focos de violencia aislados.

"Estoy adelante. Los resultados iniciales de las provincias muestran que tengo más de un 50 por ciento de la votación", dijo Abdullah a Reuters.

Los resultados preliminares no se esperan hasta dentro de dos semanas.

Obama, que envió miles de tropas adicionales a Afganistán, dijo el viernes que las elecciones en Afganistán fueron un importante paso adelante, pero advirtió que la violencia de los talibanes podría continuar mientras se procesan los resultados oficiales.

"En los últimos días, particularmente ayer, hemos visto actos de violencia e intimidación hechos por talibanes, y (...) podrían haber más en los próximos días", declaró Obama en la Casa Blanca.

Los observadores de la elección dijeron que una segunda vuelta entre Karzai, un pashtún étnico, y Abdullah, que tiene el apoyo de los tajikis en el norte, podría dividir el país entre las líneas étnicas. Ese desacuerdo podría llevar a una guerra civil, destacan.

El enviado de Estados Unidos a la región, Richard Holbrooke, dijo que está seguro que el resultado de la votación será cuestionado.

"Siempre supimos que sería una elección cuestionada. No me sorprendería ver a candidatos clamando victoria o fraude durante los próximos días", indicó Holbrooke, quien se reunió con Karzai y Abdullah en Kabul el viernes.

Abdullah llamó a la "calma, paciencia, sentido de responsabilidad" entre sus partidarios. "La violencia debería ser evitada en cualquier circunstancia", declaró a Reuters en su casa en Kabul.

Las encuestas preelectorales mostraban que Karzai llevaba la ventaja en la intención de voto pero que no alcanzaría la mayoría necesaria para evitar una segunda vuelta.

SUSPIRO DE ALIVIO

Funcionarios afganos y estadounidenses respiraron con alivio tras las elecciones que fueron relativamente pacíficas y que han sido marcadas por una dramática escalada en la violencia en las semanas previas a la votación.

Los 6.200 centros de votación deben ofrecer al público sus resultados mientras los van tabulando, con el objetivo de prevenir un fraude.

Zekria Barakzai, segundo al mando de la IEC instó a la paciencia.

"No podemos confirmar ninguna de las afirmaciones hechas por los jefes de campaña. Es el trabajo de la comisión electoral declarar los resultados. Ellos deberían ser pacientes", dijo Barakzai.