CARACAS, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha asegurado que la intervención estatal del Banesco, el mayor banco de la nación caribeña, fue "necesaria" y ha avanzado que, aunque apenas suma unos días, los primeros resultados han sido "positivos".
"Me tocó tomar una decisión necesaria de intervenir el Banco Banesco", dijo el domingo durante el simulacro para las elecciones presidenciales del 20 de mayo desde la Escuela Ecológica Nacional Bolivariana Simón Rodríguez, en Fuerte Tiuna, Caracas.
Maduro explicó que "la junta directiva nueva, designada legalmente, ya ha entrado a ver todos los números en profundidad". Entretanto, Banesco "sigue funcionando de manera normal". "Es muy positivo el resultado (...) y va a seguir siendo así", afirmó, según recoge la prensa venezolana.
El líder 'chavista' ordenó la semana pasada intervenir Banesco durante 90 días por su presunta implicación en la 'Operación Manos de Papel', con la que el Gobierno busca acabar con las "mafias económicas". La Fiscalía ha ordenado detener a once ejecutivos de la entidad financiera por, supuestamente, crear un sistema cambiario paralelo.
El presidente de Banesco, Juan Carlos Escotet, ha denunciado que se trata de una intervención estatal "injusta" porque el banco goza de buena salud y la ha atribuido a "una decisión exclusivamente política tomada en el afán de querer distraer a la opinión pública de los graves problemas" que sufre Venezuela.
En la misma línea, la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) ha rechazado la toma de control de Banesco indicando que "la escasez de efectivo, el dólar paralelo y la hiperinflación son consecuencias exclusivas del modelo económico, no de las acciones de la banca ni de ningún sector privado".
Además, ha alertado de que "genera incertidumbre y angustias en la población y en el sistema económico productivo en general justo en el momento en el que país requiere mayor estabilidad y confianza en sus instituciones". Por ello, ha pedido al Palacio de Miraflores que deje a un lado las "acciones desproporcionadas".