Actualizado 08/07/2015 18:32

¿El mayor desafío para los BRICS? Uno de sus propios socios

Por Alonso Soto

FORTALEZA, Brasil, jul 15, 15 Jul. (Reuters/EP) -

- En dos años de duras negociaciones para crear el nuevo banco de desarrollo de los BRICS, el principal escollo no fue la falta de recursos o compromiso. Fue China, el hermano mayor del grupo.

Los chinos querían en un principio una participación mayor en el banco que fue formalmente lanzado el martes por los líderes de los cinco países que forman los BRICS, en un desafío directo al dominio de Occidente sobre las finanzas globales, dijeron funcionarios involucrados en las conversaciones.

Al final, Brasil e India ganaron la pulseada para mantener la misma participación de capital entre los miembros, pero aún hay miedos de que China, la segunda mayor economía del mundo, busque una mayor influencia sobre el banco de 100.000 millones de dólares para expandir su poder político en el exterior.

"ES inevitable que los chinos dominen el nuevo banco", dijo Riordan Roett, un politólogo de la Universidad Johns Hopkins. "Los chinos no se involucran en estas empresas a menos que vayan a tener, sino control total, una influencia significativa".

Conocidos por sus marcadas diferencias económicas y políticas, los BRICS enfrenta el desafío de contener el impulso de China de controlar instituciones que se suponía daban a cada socio una voz igualitaria.

Los desacuerdos internos se hicieron evidentes el martes, cuando el grupo luchó por superar un estancamiento de último minuto en las negociaciones porque China e India se disputaban la sede del banco. Para sortear el imprevisto, Brasil retiró su pedido de tener la primera presidencia en favor de India, dijo un alto funcionario involucrado en las negociaciones.

El banco tendrá sede en Shanghái, el centro neurálgico de negocios de China.

El objetivo del banco es tomar distancia de un modelo que les da muy pocos derechos de voto a las economías emergentes y perpetúa el dominio de Estados Unidos y Europa sobre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.

"Este es un gran desafío para los BRICS. A veces cuando vas a las negociaciones y los países quieren más voz, se olvidan de algunas de sus aspiraciones nobles como cuando criticaban al FMI y el Banco Mundial", dijo Kevin Gallagher, profesor de relaciones internacionales en la Universidad de Boston.

China ya tiene la mayor parte de un nuevo fondo de reservas de emergencia, que también fue lanzado el martes y es conocido como el Acuerdo de Reservas Contingentes. Prometió aportar 41.000 millones de dólares, mientras que Brasil, Rusia e India aseguraron que pondrían 18.000 millones cada uno y Sudáfrica 5.000 millones.

LA INFLUENCIA CHINA

Si bien la economía de China se ha desacelerado en los últimos años, sigue siendo el principal motor de crecimiento del mundo. Brasil, India y Rusia han bajado aún más el ritmo desde que el bloque adoptó por primera vez el acrónimo BRIC en la década pasada. La mucho más pequeña Sudáfrica se sumó al grupo en 2010.

La economía china es más grande que las de todos los otros miembros de los BRICS combinadas y representa la mayor parte del comercio exterior del bloque.

"Es natural para China tener más influencia en el banco por la importancia de su economía", dijo Paulo Wrobel, profesor en el Centro de Políticas de BRICS de la Pontificia Universidad Católica de Rio de Janeiro.

El poderío económico de China a ratos la ha enfrentado a sus propios socios en los BRICS.

Una avalancha de importaciones en Brasil de productos manufacturados en China en los últimos tres años llevó al país sudamericano a aumentar las barreras comerciales para evitar que sus manufacturas fueran golpeadas.

En privado, otros miembros han fruncido el ceño por la lenta liberalización de la moneda china, el yuan. Los controles cambiarios han mantenido a sus exportaciones muy baratas.

Por lo tanto, funcionarios de otras economías más pequeñas han intentado evitar que China se vuelva demasiado poderosa en las nuevas instituciones. Las reglas internas del banco buscan prevenir que cualquier miembro gane demasiada influencia.

"La idea es tener una institución profesional regida por las mejores prácticas bancarias y una gobernanza compartida que mantendrá el riesgo a raya", dijo a Reuters Luciano Coutinho, jefe del banco de desarrollo brasileño BNDES, en los márgenes de la cumbre.

Los BRICS mantendrán una participación mínima del 55 por ciento en el prestamista, pero algunos analistas dicen que China podría incrementar su tajada al traer nuevos países miembros bajo la esfera de su influencia. Sin embargo, otros argumentan que le conviene a China ser un jugador de equipo, al menos por ahora.

"Para China es interesante hacer ver como que esto no es un banco dominado por los chinos porque eso le permitirá financiar proyectos que de otra manera no podría", dijo Oliver Stuenkel, un profesor de la Fundación Getulio Vargas en Sao Paulo. "El banco es una manera de despolitizar el crédito chino".