Actualizado 12/06/2014 18:19

Mercado de cobre, en alerta por movimiento de inventarios de LME ante investigación en China

Por Josephine Mason

NUEVA YORK, 12 jun, 12 Jun. (Reuters/EP) -

- Miles de toneladas de cobre que están siendo rápidamente retiradas de algunos almacenes chinos podrían permanecer fuera de alcance por meses, en momentos en que bancos y operadores que buscan un refugio seguro para su metal optan por salir de la red de la Bolsa de Metales de Londres (LME).

El temor a fraudulentas operaciones de financiamiento en algunos almacenes en el puerto chino de Qingdao ha llevado a algunos bancos y comerciantes a reducir el crédito para acuerdos de financiamiento o reubicar el metal en firmas de almacenamiento más conocidas, incluyendo algunas en Corea del Sur y otros lugares que forman parte del vasto sistema de la LME.

El alejamiento de los turbios almacenes chinos generó preocupaciones entre los operadores por un potencial aumento en las existencias certificadas de la red de la LME, algo que seguramente sumará presión a los decrecientes precios.

Hasta 300.000 toneladas de cobre, casi el doble del volumen total de inventarios que se encuentran en los depósitos globales de la LME, podrían ser liberados para septiembre, según analistas de Macquarie.

Pero aún se desconoce qué cantidad de ese metal aparecerá en los registros diarios de la LME, dijeron algunas fuentes del mercado familiarizadas con los complejos acuerdos de financiamiento que han incrementado con fuerza ante el fácil acceso al crédito en China.

Parte del metal permanecerá en China y será trasladado a almacenes que pertenecen directamente a operadores, en lugar de ser alquilado por terceros, dijeron personas vinculadas al mercado. Esto sería suficiente para calmar el temor de las compañías a que sus existencias también hayan sido comprometidas como garantía para otras operaciones de crédito.

De manera alternativa, el metal todavía podría ser enviado al extranjero pero a depósitos operados por compañías aprobadas por la bolsa en almacenes fuera del sistema contable oficial de la LME, dijeron algunos, asegurando que permanezca seguro aunque no necesariamente disponible para ser distribuido.

La incertidumbre sobre el volumen del metal que está siendo trasladado, y dónde terminará, ha generado una frenética especulación en momentos en que los bancos luchan por evaluar su exposición a las supuestas operaciones fraudulentas, que sacudieron al mercado global de cobre en la última semana.

La investigación en el puerto chino de Qingdao, donde se sospecha que una compañía utilizó recibos del metal múltiples veces para obtener financiamiento, ha sacudido a los mercados en medio de temores de que los problemas puedan extenderse a otras terminales y obligue a tomar medidas severas en cuanto al uso del metal como garantía para financiamiento.