Actualizado 25/01/2007 19:10

México.- El precio de la tortilla no bajará a pesar de las medidas del Gobierno, según los expertos


CIUDAD DE MÉXICO, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

El precio de la tortilla en México no bajará, a pesar de que se aumente la oferta de maíz, ya que si se incrementan los cupos de importación sólo se satisfará el abasto, pero no equilibrará el precio, según afirmaron varios expertos, que coincidieron en que este año "difícilmente" se verá una bajada en el precio de la tortilla y del maíz.

El vicepresidente de la Cámara Nacional de Maíz Industrializado, José Cacho, explicó que si el Ejecutivo quiere otorgar subsidios para frenar este incremento, le costaría 16.000 millones de pesos (1.123 millones de euros) al año para bajar un peso en el precio de la tortilla, alimento considerado básico en la dieta de los mexicanos.

Esta cantidad representaría el 44 por ciento del presupuesto actual del programa Oportunidades, que es de 36.000 millones de pesos (2.500 millones de euros). El subsidio a la tortilla sería equivalente a los recursos asignados a las carteras de Educación y Desarrollo Social, según datos del Presupuesto aprobado para 2007.

Para el profesor del departamento de Finanzas del Instituto Tecnológico de Monterrey, José Luis de la Cruz, "el mecanismo de precios en México no funciona como libre mercado, y añadió que el Acuerdo para la Estabilización del Precio de la Tortilla que dio a conocer el Gobierno refleja contradicciones porque la postura del secretario de Economía antes del anuncio era de dejar el producto a los vaivenes de la oferta y la demanda. "Este acuerdo observa más tintes políticos y no se ve que detenga el aumento en el precio de la tortilla", señaló De la Cruz.

PROGRAMA PARA LOS MÁS DESFAVORECIDOS

De acuerdo con los especialistas, el reciente incremento en el precio de la tortilla es producto de los mayores costes de operación e ineficiencia de las tortillerías, es decir, la parte final de la cadena maíz-tortilla. Según Cacho, el maíz contribuye en sólo el 30 por ciento al incremento en el precio del alimento, por lo que el problema no reside en este segmento. La Administración de Felipe Calderón acordó con empresarios y productores de maíz establecer en 8,50 pesos el kilo de tortilla.

En su opinión, una medida alternativa a la propuesta por el Ejecutivo sería la canalización del abasto del producto de una manera directa a través de algún programa orientado a las familias de más bajos recursos, según informa el diario local 'El Universal'.

Dicha medida se aplicó por primera vez en 1986 a través de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (CONASUPO). Como parte del programa Maíz-Tortilla, el Gobierno otorgaba un kilo del grano sin coste para las familias con menos recursos, con lo que se controlaba el precio del alimento.

Durante la administración de Vicente Fox, la ministra de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota, solicitó reactivar el programa Maíz-Tortilla para el ejercicio fiscal 2003, con lo que, según el acuerdo emitido por este ministerio, "las familias en pobreza que habitan en colonias ubicadas en localidades urbanas de 15.000 habitantes o más" adquirirían sin coste un kilo diario de tortilla.

Sin embargo, de acuerdo con José Cacho, reactivar este programa sería aberrante, ya que, además de su coste, sólo representaría un "paliativo inmediato" para resolver el problema.

POSIBLE REPERCUSIÓN

Por su parte, Juan Ginebra, experto empresarial, recordó que el tema de la tortilla sólo es el inicio de un problema estructural que viene arrastrando el país, y que este esquema de aumento en los precios repercutirá en otros productos agrícolas.

Los precios de la tortilla, que en el estado de Sonora ya rebasan los 11 pesos (0,77 euro) el kilo, según la Secretaría de Economía, afectan a la población más pobre del país. Juan Habermann, presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas de Sonora (CAADES) resaltó que es necesario que el Gobierno se tome en serio "este problema, y en general el tema del campo, porque el acuerdo sólo es temporal y el problema puede seguir creciendo".

Según José Cacho, una familia de cuatro personas en condiciones de pobreza consume tres kilos diarios de tortilla, lo que significa que destinan el 10 por ciento de sus ingresos diarios a consumir este producto. El consumo promedio de la tortilla en México por habitante es de 270 gramos al día.