Por Manuel Farías
SANTIAGO (Reuters/EP) - Las monedas de América Latina podrían operar mixtas esta semana, atentas a noticias de sus propias economías, aunque con la posibilidad latente de que el dólar retome un impulso alcista.
En Brasil, la primera economía de la región, el real podría continuar una racha alcista frente al dólar, que lo ha llevado a fortalecerse más de un 20 por ciento en el año, tras una rebaja de la tasa de interés referencial de ese país la semana pasada y las expectativas de mayores flujos.
El Banco Central brasileño recortó la tasa Selic a un histórico 9,25 por ciento anual y la tendencia podría continuar.
"Puede disminuir un poco la entrada de recursos para las operaciones de arbitraje en el mercado de tasas de interés pero, por otro lado, la caída de la Selic podrá aumentar la entrada de recursos extranjeros vía bolsa", dijo Francisco Carvalho, gerente de cambios de la correduría Liquidez en Sao Paulo.
El flujo cambiario de Brasil fue positivo en 550 millones de dólares en la primer quincena de junio.
El peso mexicano, en tanto, estará atento a las cifras de la economía de Estados Unidos y el comportamiento del dólar en los mercados internacionales.
La moneda mexicana perdió un 0,93 por ciento la semana pasada frente al dólar, aunque en el año acumula un alza de un 2,98 por ciento.
"Se espera que el dólar siga manteniendo debilidad frente a los principales pares, como el euro y la libra esterlina, y eso influya directamente en los precios del petróleo. Es probable que el peso mexicano vuelva a los 13.45/13.50 por esta debilidad del dólar en el mercado internacional", dijo Oswaldo Martínez, director comercial de la consultoría Analix, en la capital mexicana.
CHILE, ATENTO A B. CENTRAL
El mayor riesgo de las monedas de la región, según analistas, es que el dólar se recupere de las pérdidas recientes frente a otras importantes monedas, lo que ha favorecido también a las divisas de la región.
"El peligro para la región es que todas las pérdidas del dólar respecto a las monedas grandes se reviertan", dijo Pedro Tuesta, analista de la firma 4Cast.
El mercado cambiario chileno, que en lo que va del año acumula una apreciación de un 14,1 por ciento frente al dólar, en tanto, podría comenzar a perder fuerza ante la divisa estadounidense.
"El tipo de cambio debería oscilar entre los 558 y los 570 pesos (por dólar), dependiendo de lo que ocurra con los mercados externos y el precio del cobre, que ha sido un factor importante en los últimos días", dijo un operador chileno.
Chile es el mayor productor mundial de cobre.
"Otra de las razones para esperar un rebote de precios, es que las licitaciones de dólares del Banco Central terminarán dentro de pocos días, con lo cual ya no habrá un cuota fija de dólares entrando al mercado como ha ocurrido en los últimos meses", agregó.
El Banco Central chileno licita 50 millones de dólares diarios, como parte de un programa del Ministerio de Hacienda, por un total de 3.000 millones de dólares, para financiar las inversiones y gastos en pesos de un plan de estímulo fiscal destinado a enfrentar los efectos de la crisis global.
Mientras, el peso de Argentina seguirá fuertemente regulado por el Banco central de ese país, que realiza diarias intervenciones en el mercado de cambios con el fin de impedir oscilaciones indeseadas de la moneda doméstica.
El peso argentino continúa cotizando en niveles mínimos desde el 2002.
"Interesante sigue siendo el nivel de demanda de billetes (dólares) por parte del público que de a poco comienza a incrementarse, y aunque lejos de niveles alcanzados en otras oportunidades, va poniéndose a tono con lo que ocurre habitualmente antes de cada elección", dijo Carlos Risso, analista de Notibancos.com.
Argentina tendrá elecciones de medio término el próximo 28 de junio.