ASUNCION (Reuters/EP) - La participación de las mujeres latinoamericanas en el mercado laboral continúa aumentando aunque a un ritmo menor al del período previo a la crisis económica mundial, dijo un informe presentado el miércoles.
El estudio auspiciado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dijo que la pérdida de empleos se concentra en sectores como la construcción y algunas ramas de la industria, lo que afecta principalmente a la ocupación masculina.
"Los efectos de la crisis en el sector de servicios y particularmente en el comercio, donde se concentra el empleo femenino, se expresarán probablemente con mayor fuerza en los próximos meses", dijo el informe presentado en Asunción, denominado "Trabajo y Familia".
La OIT estimó recientemente que como resultado de la crisis económica y financiera mundial se perderían hasta 50 millones de empleos a nivel global, de los cuales 22 millones serían de mujeres.
"Cuando hay crisis lo que suele ocurrir es que los jóvenes tienden a permanecer más tiempo en el sistema escolar, a retrasar su ingreso al campo laboral, porque les es más difícil hacerlo", explicó a Reuters María Elena Valenzuela, especialista regional en políticas de género de la OIT.
"Pero ocurre que no solamente las jóvenes se están incorporando sino también muchas más", agregó Valenzuela, quien coordinó la elaboración del documento, al tiempo de advertir sobre la necesidad de fortalecer políticas que tengan por objetivo la igualdad de género en esta coyuntura.
En las últimas dos décadas, la participación laboral femenina aumentó de 32 a 53 por ciento en América Latina y el Caribe, con más de 100 millones de mujeres en el mercado laboral de la región en la actualidad.
La brecha de participación entre hombres y mujeres ha caído pero es aún pronunciada, con un promedio regional de 25 puntos porcentuales, agregó el estudio, que aborda la necesidad de conciliar la vida laboral y familiar y la corresponsabilidad en las tareas domésticas entre hombres y mujeres.
Un factor que incidió en el aumento de la participación laboral de la mujer es la creciente presencia de familias con jafatura femenina. Alrededor de un tercio de los hogares de la región depende de los ingresos de una mujer que mantiene a su familia sin el apoyo de una pareja, señaló el documento.
La incorporación de mujeres a la fuerza de trabajo continuará creciendo. Se estima que para finales del 2010 la participación laboral femenina llegará a 53,5 por ciento y en 20 años alcanzará un 60 por ciento.