Actualizado 29/07/2015 12:15

Obama pide al Congreso que incluya a Puerto Rico en Ley de Quiebras

Hotel abandonado en San Juan de Puerto Rico
Foto: ALVIN BAEZ / REUTERS

   WASHINGTON, 29 Jul. (Notimérica) -

   El gobierno de Barack Obama ha instado este martes al Congreso estadounidense a aprobar un proyecto de Ley que incluya a las corporaciones públicas de Puerto Rico en el capítulo 9 de la Ley federal de Quiebras, para que el Estado Asociado pueda reestructurar sus pasivos "insostenibles", que ascienden a unos 73.000 millones de dólares.

   "Al conceder acceso a Puerto Rico a un régimen de quiebra ordenada tan pronto como sea posible, el Congreso puede ayudar a poner Puerto Rico --y los millones de ciudadanos estadounidenses que viven allí-- en el mejor camino para una recuperación sostenida", dijo el secretario del Tesoro, Jack Lew, en un carta enviada al presidente del Comité de Finanzas del Senado, el republicano Orrin Hatch, informa Reuters.

   El anuncio sobre el apoyo del Gobierno de Obama, coincide con la vista de dos días (lunes y martes) a Washington, que ha realizado el gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, donde ha sostenido varias reuniones sobre la situación fiscal de la Isla, con el fin de promover el proyecto HR-870, que propone reinsertar a Puerto Rico en la Ley de Quiebras Federal, especialmente, en el Capítulo 9, de donde fue excluido en el 1984.

   "Las expresiones del secretario Lew validan que el plan puesto en marcha por esta administración es el correcto, incluyendo la propuesta de establecer un plan de ajuste fiscal y económico a cinco años", dijo el secretario de la Gobernación, Víctor Suárez Meléndez.

   "Nos sentimos satisfechos de que el secretario (del Tesoro) reconozca y apoye los esfuerzos del gobernador Alejandro García Padilla en busca de la recuperación económica del país, teniendo presente el bienestar de los puertorriqueños. Esto demuestra que las reuniones que hemos sostenido con el Departamento del Tesoro, incluyendo la de hoy (por el martes) entre el gobernador y Lew, han redundado en apoyo por parte del Ejecutivo federal", añadió.

   REUNIONES.

   A su llegada, García Padilla sostuvo sendas reuniones con varios congresistas de Estados Unidos, con el propósito de lograr avances a favor de los planes de su administración para la recuperación económica del país.

   El representante republicano por el cuarto distrito de Carolina del Sur, Trey Gowdy, recibió al gobernador, quien posteriormente se reunió con el congresista republicano de origen puertorriqueño y representante por el primer distrito de Idaho, Raúl Labrador. Luego, el primer mandatario sostuvo un encuentro con el representante Ted Poe, del Quinto Distrito de Wisconsin.

   Asimismo se reunió con el congresista republicano por el quinto distrito de Wisconsin y vicepresidente del Comité de lo Jurídico, Jim Sensenbrenner. De otra parte, García Padilla estuvo reunido con el congresista republicano por el primer distrito de Ohio, Steve Chabot.

   En las reuniones, el Ejecutivo abogó por la aprobación del proyecto HR-870 para que Puerto Rico sea incluido en la Ley de Quiebras federal.

   COMPARADO CON GRECIA.

   El Estado Libre Asociado de Puerto Rico, que ha llegado a ser comparado con Grecia por su nivel de endeudamiento, afronta en la actualidad una situación económica que, según el gobernador, Alejando García Padilla, les podría llevar a una "espiral de la muerte".

   Recientemente, el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston, declaró inconstitucional el proyecto de ley para la Recuperación de las Corporaciones Públicas, conocida como la 'quiebra criolla'. Con esa decisión, las corporaciones públicas quedaban totalmente desprovistas de un proceso organizado, fuera a nivel federal o local, para un proceso de quiebras.

   Según el gobernador, se trata de una aplicación de la ley federal que es "injusta" para Puerto Rico, ya que por un lado, se dice que el Capítulo 9 restringe a Puerto Rico de aprobar una ley de recuperación, pero por otro, "no concede ninguna alternativa jurídica para enfrentar la situación".

   El pasado 29 de junio, el gobernador de Puerto Rico reconocía, en un mensaje dirigido a los ciudadanos del Estado Libre Asociado de Estados Unidos, que la deuda de la Isla, que asciende a unos 73.000 millones de dólares, es "impagable", y pedía al Gobierno de Barack Obama la habilidad de declarar a Puerto Rico en quiebra, como hizo la ciudad de Detroit en 2013.

   Según el 'Informe Krueger', elaborado por un grupo de economistas, ex funcionarios del Fondo Monetario Internacional, de no tomar medidas para resolver las causas de los déficits, el tamaño de los mismos en los próximos 5 años fiscales podrían alcanzar en la Isla de 3.000 a 5.000 millones de dólares anuales.

   El pasado 13 de julio, el Gobierno de Puerto Rico mantuvo en Nueva York una primera reunión con los acreedores, en la que abogó por renegociar lo que debe el Estado Libre Asociado, unos 73.000 millones de dólares, pero también porque el "sacrificio sea compartido".