Actualizado 02/09/2009 18:39

Oposición boliviana no lograría candidatura única contra Morales

Por Carlos Alberto Quiroga

LA PAZ (Reuters/EP) - Los esfuerzos de la oposición derechista de Bolivia por presentar un candidato único frente al presidente Evo Morales en los comicios de diciembre parecían estar al borde del fracaso el miércoles, luego de que al menos cuatro conservadores anunciaran sus propias aspiraciones.

En las elecciones del 6 de diciembre, las primeras bajo una Constitución "plurinacional" recién puesta en vigencia, el líder indígena buscará una reelección que por ahora parece fácil y el control de la Asamblea Plurinacional, como pasará a llamarse el Congreso, para seguir su "revolución" socialista.

"Vemos que ahora hay cuatro candidaturas (de la oposición derechista), así ni siquiera vamos a llegar a segunda vuelta", dijo el gobernador del distrito oriental de Santa Cruz, Rubén Costas, al admitir el fracaso de sus gestiones para montar un frente electoral bajo la consigna "todos contra Evo".

El líder de un movimiento autonomista regional que hace un año protagonizó una fallida revuelta contra Morales agregó que "ya no vale la pena hablar de un frente único (...) puesto que la oposición esta fraccionada y es imposible lograr su conformación".

Añadió que en el proceso están primando los intereses personales de los posibles candidatos.

Costas hizo la declaración a reporteros al día siguiente de que sus aliados y ex gobernadores Manfred Reyes Villa -cuyo mandato fue revocado en un referendo el año pasado- y Leopoldo Fernández -preso en espera de juicio por genocidio y delitos económicos- anunciaran su candidatura en binomio.

La dupla Reyes Villa-Fernández se sumó a las candidaturas previamente anunciadas del magnate del cemento y las hamburguesas Samuel Doria Medina, el ex presidente Jorge Quiroga y el ex líder cívico de Santa Cruz, Germán Antelo.

La dispersión opositora parecía insuperable desde principios de semana, cuando la analista de línea conservadora Jimena Costa renunció a la candidatura presidencial que había lanzado semanas antes con el propósito principal de aglutinar a todos los rivales de Morales.

El Gobierno respondió al anuncio del binomio Reyes Villa-Fernández con la advertencia de que el segundo tiene derecho a ser candidato pero está prohibido legalmente de hacer proselitismo desde una cárcel.

"Siento una decepción, la democracia es tan generosa que hasta personas con un pasado oscuro pueden participar", dijo Morales en la noche del martes sobre Reyes Villa y Fernández, de quienes recordó vínculos con pasadas dictaduras militares.

Reyes Villa dijo que, pese a la aparente división, él representaba "al total de la oposición", y aseguró que la dura reacción inicial del oficialismo ante su candidatura evidenciaba que "están destilando odio y ronda porque no esperaban un tsunami, porque saben que vamos a ganar".

MORALES, FAVORITO

El optimismo de Reyes Villa contradecía a la intención de voto revelada el pasado fin de semana por una encuesta del grupo internacional Gallup, que dio a Morales un respaldo del 57,7 por ciento del electorado nacional.

El sondeo, publicado por medios locales, ubicó a Reyes Villa en un lejano tercer puesto, con 8,6 por ciento de intención de voto, detrás de Doria Medina, con 9,7 por ciento.

Aún más desfavorecidos aparecían Quiroga, Antelo y el ex vicepresidente indígena Víctor Hugo Cárdenas, el primero en lanzar su campaña proselitista hace más de tres meses.

Gallup dijo que Morales -quien impulsa un proceso de estatización de la economía, incluida la exportación de gas a Brasil y Argentina- triunfaría en los nueve departamentos, lo cual le aseguraría el control del Senado, que en los últimos cuatro año fue bastión opositor.

El gobernante boliviano cuenta con un abierto respaldo del presidente venezolano, Hugo Chávez, y dijo varias veces que espera lograr en diciembre un respaldo mayor al 54 por ciento de votos con que fue elegido en diciembre del 2005.