Publicado 11/07/2019 17:01

Un paso más cerca del sistema de pensiones que propone Bolsonaro, ¿cuáles son las claves?

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro - REUTERS / ADRIANO MACHADO - Archivo

   BRASILIA, 11 Jul. (Notimérica) -

   Los esfuerzos de la oposición brasileña parece que no han bastado para poner freno a la reforma del sistema de pensiones, la principal iniciativa del presidente Jair Bolsonaro.

   Tal es así que la Cámara Baja del Congreso de Brasil aprobó este miércoles el texto principal de este proyecto de ley con un contundente margen: 379 votos a favor y 131 en contra, un resultado muy por encima del margen previsto por el Gobierno.

   El líder ultraderechista ha festejado la noticia y, a través de su cuenta en la red social Twitter, ha asegurado que el país está "cada vez más cerca de llegar al cambio del empleo y la prosperidad".

   Sin embargo, Bolsonaro todavía no puede cantar victoria porque falta una última votación en la que se podrán contemplar modificaciones antes de enviar el proyecto de ley al Senado. Así, se prevé que este segundo encuentro tenga lugar antes de este sábado.

   La iniciativa fue planteada al Parlamento como una propuesta para arreglar el sistema de finanzas públicas y, al mismo tiempo, reactivar la economía brasileña consiguiendo un ahorro fiscal de unos 265.000 millones de dólares en un plazo de 10 años.

   CAMBIOS

   Desde que Bolsonaro y su equipo de Gobierno dieron a conocer la iniciativa, la polémica que ha surgido en torno a ella ha aumentado la indignación de la oposición brasileña.

   Las modificaciones sobre el actual sistema de pensiones son claramente los motivos que han impulsado al sector izquierdista del país a posicionarse y manifestarse en contra del mismo.

   El principal punto del proyecto de ley es modificar el sistema de contribución instaurando uno de capitalización privada. Esta modificación endurece el acceso a la jubilación, ya que se basará en lo ahorrado a lo largo de los años trabajados.

   Con el objetivo de incentivar el régimen de capitalización, este proyecto también reforma la edad mínima para alcanzar la jubilación atendiendo al género. Así, mientras hasta ahora las mujeres podían retirarse del mundo laboral con 30 años cotizados y los hombres con 35, por lo que, en ocasiones a los 50 años se jubilaban, ahora la edad mínima se instala en los 62 y 65 años, respectivamente.

   Los militares son la excepción de estas nuevas normas, ya que no formarían parte del régimen general de cotización, sino que para este colectivo no sería aplicada la reforma por el momento, aunque se pretende que se rijan bajo unas nuevas reglas.