Actualizado 25/08/2009 21:10

Presidente paraguayo rechaza a juez designado por el Congreso

ASUNCION (Reuters/EP) - El presidente paraguayo, Fernando Lugo, rechazó el martes la designación de un nuevo integrante de la Corte Suprema de Justicia, que fue decidida por el Congreso y que para el mandatario obedece a "intereses políticos" que su Gobierno no va a aceptar.

En lo que amenaza con dificultar aún más la gobernabilidad en el país sudamericano y profundizar los roces entre el Ejecutivo y el Legislativo, Lugo anunció el rechazo al nombramiento en un mensaje transmitido por televisión y llamó a un diálogo entre los poderes para definir el cargo.

La elección por parte del Senado del juez Agustín Lovera Cañete para suplir una vacancia de años en el máximo órgano judicial, "responde al viejo vicio instalado en (...) nuestro país de recurrir al cuoteo político para ocupar los cargos judiciales", dijo Lugo en su mensaje.

"Este Gobierno no va a aceptar la imposición de candidatos que claramente responden a intereses estrictamente políticos. Me han pedido el acuerdo en mi calidad de titular del Ejecutivo. No lo voy a otorgar", enfatizó.

El Senado había escogido días atrás al juez Lovera Cañete, asociado al opositor Partido Colorado, pese a que Lugo ya había anticipado que podría oponerse al acuerdo exigido por la Constitución para el nombramiento del magistrado.

El presidente, un socialista moderado que acabó con más de seis décadas de Gobierno conservador del Partido Colorado, no tiene mayoría en las cámaras y las constantes fricciones con el Congreso han trabado el avance de las reformas que prometió cuando asumió el poder hace poco más de un año.

A comienzos del 2009, el presidente intentó sin éxito que el Congreso aprobara un magistrado para suplir la vacancia en la corte -compuesta en su mayoría por miembros leales al Partido Colorado- en el primero de una serie de desencuentros que socavaron la gobernabilidad.

La reforma del Poder Judicial es uno de los objetivos del Gobierno de Lugo, quien consideró que la justicia en el país "es esencialmente débil y vulnerable y soporta la presión de grupos económicos que apuestan a torcer la soberanía", según dijo en el mensaje.

Lugo llamó a una mesa de diálogo para discutir la organización del Poder Judicial, ante criterios dispares sobre cómo proseguir a partir del rechazo del juez seleccionado. Algunos juristas creen que el Senado debe escoger entre otros dos candidatos propuestos, mientras otros aseguran que debe conformarse una nueva terna.