QUITO (Reuters/EP) - La Procuraduría de Ecuador iniciará una investigación para determinar si la denuncia de la petrolera Chevron Corp, sobre una supuesta red de sobornos en un juicio ambiental, forma parte una campaña de desprestigio en contra del país andino, dijo el jueves un funcionario.
La indagación será independiente a la que pueda iniciar la Fiscalía ecuatoriana en el ámbito legal para investigar los supuestos actos de corrupción denunciados por la estadounidense Chevron y que involucra al juez encargado del caso y a supuestos funcionarios gubernamentales.
"La investigación no tiene que ver con las acciones de orden penal, pero me interesa conocer si la actuación de Chevron se enmarca dentro de esta política (...) en contra del Estado ecuatoriano", dijo el procurador Diego García.
La campaña "que viene desde hace algún tiempo desarrollandose le hace parecer como un estado que actúa al margen de la ley e ilegalidad", agregó a periodistas.
La Procuraduría actúa como abogado del Estado en controversias del país andino con empresas extranjeras que operan en su jurisdicción.
Chevron presentó unos videos, en los que el juez Juan Núñez dice que fallará en contra de la petrolera y rechazará las apelaciones, a pesar de que el juicio no ha concluido y queda por presentar evidencia.
En base de estas pruebas, Chevron solicitó la destitución de Núñez, lo que podría implicar que el juicio, cuya sentencia está próxima a salir, tenga retrasos.
El juicio ambiental, por una cuantía de unos 27.000 millones de dólares, se desarrolla en la ciudad de Lago Agrio tras una demanda presentada por miles de indígenas que acusan a Chevron de contaminar el ambiente durante sus operaciones en Ecuador.
García señaló que es prematuro hablar de alguna demanda internacional por parte del Estado en contra de Chevron, pero no la descartó como una opción, una vez que se concluyan las investigaciones.
El funcionario dijo además que solicitó a la Fiscalía que inicie una indagación en base de los videos y las declaraciones de los presuntos involucrados, sin que eso implique que están reconociendo la veracidad de las grabaciones.
(Por Alexandra Valencia. Editado por Magdalena Morales)
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