Por Ludwig Burger
FRANCFORT (Reuters/EP) - Las compañías químicas globales, como la más grande del mundo, BASF, no ven señales de recuperación ya que la demanda de industrias duramente golpeadas por la recesión sigue débil, según una serie de resultados del sector conocidos el jueves..
La dependencia de la industria química de aquellos sectores golpeados como la electrónica, el automotor y la construcción la hacen particularmente vulnerable a la crisis, mientras que sus altos costos indirectos son difíciles de reducir.
La alemana BASF, considerada un paradigma de la estabilidad en los pagos a sus accionistas, dijo que probablemente recorte su dividendo por primera vez en 16 años.
Mientras que Dow Chemical, la mayor del sector en Estados Unidos por ventas, incurrió en casi 1.000 millones de dólares en cargos de reestructuración, principalmente debido a su adquisición de Rohm & Haas.
Si se excluyen los cargos y dividendos preferentes, Dow ganó 5 centavos de dólar por acción en el segundo trimestre, por debajo de los 81 centavos de hace un año. La firma comentó que no veía "mejoras materiales en las condiciones del mercado para el resto del año".
Con esto se hace eco de los comentarios de Bayer, el mayor fabricante de plásticos para DVD y de químicos para gomas de aislación, de que la demanda tocó fondo pero que la industria no estaba tan cerca de un repunte sostenido.
BASF dijo que las ganancias trimestrales antes de intereses e impuestos (EBIT) excluyendo ítemes extraordinarios bajaron un 53 por ciento, a 1.140 millones de euros (1.610 millones de dólares), levemente por encima del promedio de estimaciones de los analistas de 1.070 millones de euros.
La empresa alemana prevé una significativa caída de ventas y utilidades en el 2009, incluso si se toma en cuenta a Ciba, la rival suiza que compró en más de 3.000 millones de dólares meses antes de que la demanda mundial de químicos colapsara el año pasado.
"El único optimismo que veo es en agroquímicos y en servicios petroleros, pero de ningún modo en químicos", comentó Martin Flueckiger, analista de la correduría suiza Helvea.
Aparte de China, donde la demanda se ha estado recuperando de nuevo, "básicamente se ve estabilización en bajos niveles", agregó Flueckiger.
FORTUNA DISPAR
Otras químicas más pequeñas tuvieron suertes dispares.
Tanto Wacker Chemie -que provee de aros de silicona a los fabricantes de paneles solares y microprocesadores- y la suiza Clariant tuvieron pérdidas en el segundo trimestre.
Clariant dijo que las ventas anuales podrían bajar hasta un 20 por ciento.
La ganancia operacional del segundo trimestre de la belga Solvay disminuyó menos de lo esperado gracias a ahorros de costos y menores precios de la energía, que le ayudaron a compensar la debilidad de las ventas, pero advirtió de que los mercados permanecían difíciles.
Solvay, una de las pocas híbridas químicas-farmacéuticas que quedan junto con Merck KGaA y Bayer, agregó que tendría más claridad en el cuarto trimestre sobre las opciones para su unidad de medicamentos, que podría ser puesta en venta.
El grupo finlandés Kemira, sin embargo, dio una nota más optimista sobre el mercado.
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