SANTO DOMINGO, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
El gobierno de Haití planea prohibir la importación de harina procedente de República Dominicana, según han denunciado Comerciantes de la región Norte del país antillano, que han advertido de las implicaciones económicas que conllevaría esta medida.
De este modo, prosiguen los problemas comerciales entre Haití y la República Dominicana, luego de la veda impuesta por dicho país a los pollos, huevos y salami producidos en República Dominicana.
El presidente de la Federación de Comerciantes Unidos de Dajabón, Freddy Morillo, atribuyó la eventual prohibición en las exportaciones de harina hacia Haití a intereses comerciales del vecino país, según recoge el rotativo dominicano Diario Libre.
Según Morillo, las autoridades haitianas quemaron recientemente un camión cargado de harina, producto que constituye uno de los principales de exportación hacia ese mercado, luego de cruzar por la frontera de Elías Piña.
Respecto a este conflicto, el el presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago (ACIS), Sandy Filpo, advirtió de que si se prohíbe la importación de harina, varios de sus afiliados irían a la quiebra.
ALCOHOL
A su vez, la Asociación Dominicana de Fabricantes de Cerveza (Adoface) ha mostrado su preocupación por la denuncia de que en República Dominicana se ponen trabas a la importaciones de cerveza de Haití.
Se refirió así al ex cónsul general de Haití en Santo Domingo, Edwin Paraison, quien recientemente dijo que empresarios haitianos se quejan de que en República Dominicana se les impide la entrada a productos haitianos de probada calidad internacional como el ron Barbancourt y la cerveza Prestige, a pesar de que la última cuenta con premios internacionales.
Al respecto, Adoface sostiene que "el sector cervecero dominicano siempre se ha caracterizado por ser respetuoso de todas las leyes dominicanas, los acuerdos de libre comercio firmados por el país y todo el ordenamiento jurídico internacional del cual formamos parte", resaltó.
Puntualizó que la gran variedad de productos que se comercializan en el país es una prueba de la apertura del mercado dominicano a la incursión de mercancías de otras naciones.