Por Emily Kaiser
WASHINGTON (Reuters/EP) - La recuperación económica de Estados Unidos se apoya sobre pilares muy delicados.
Un repunte del sector manufacturero, alentado por los incentivos de 3.000 millones de dólares del programa gubernamental "Efectivo por Chatarra" para alentar las ventas de autos, ha hecho que muchos economistas aumenten sus proyecciones del crecimiento económico para este año.
Pero los sectores de la economía que explican la mayor parte de los empleos y el crecimiento, la industria de servicios y el consumo, todavía se ven muy mal. Y, a menos que mejoren pronto, la reactivación podría tropezar.
"La recuperación del sector servicios, que ha sido el motor del crecimiento en décadas recientes, parece estar frenándose", dijo Julia Coronado, un economista de BNP Paribas en Nueva York.
"En los próximos meses, o bien el repunte de la demanda de productos arrastra al sector servicios con un retraso, o la recuperación de la demanda de bienes vendrá a expensas de los servicios. Estaremos mirando los indicadores de la demanda discrecional del consumidor para determinar qué escenario se está dando", dijo.
La Casa Blanca sin duda también está siguiendo de cerca los datos. Para el presidente Barack Obama, quien ha dicho que no puede haber recuperación mientras sigan apilándose los despidos, el tono de los datos económicos en los próximos meses será crucial.
Dos informes recientes subrayaron la división entre las manufacturas y el mucho más amplio sector servicios, que incluye desde peluquerías y zapaterías hasta la medicina.
El índice de actividad manufacturera del Instituto de Gerencia y Abastecimiento de Estados Unidos (ISM por sus siglas en inglés) para julio mejoró más de lo previsto, y hubo lecturas alentadoras tanto de nuevos pedidos como del empleo.
Pero el componente del sector servicios del ISM se deterioró imprevistamente, y las firmas siguieron recortando puestos.
Considerando que los empleos de servicios explican más del 80 por ciento de los empleos no agrícolas de Estados Unidos, el tono más flojo es preocupante y requiere un monitoreo cercano en los próximos meses.
La recuperación podría seguir distintos caminos. O bien el resurgimiento manufacturero desata una reacción en cadena de mejoras en toda la economía, o la recuperación sigue muy limitada, ofreciendo sólo un impulso breve al crecimiento.
Si bien los sondeos muestran que la gran mayoría de los economistas creen que la recesión está terminando, están profundamente divididos sobre el sendero más probable de la reactivación.
En el prestigioso sondeo Blue Chip, divulgado el lunes, el 16 por ciento creía que la recuperación sería robusta, parciéndose a la letra "V". Pero igual proporción de economistas vieron una recuperación lenta seguida de otro declive, una recesión "de doble caída", con forma de "W".