(Repite nota enviada en la madrugada, texto sin cambios)
PEKIN, 30 sep, 30 Sep. (Reuters/EP) -
- La actividad del enorme sector industrial de China mostró señales de estabilización en septiembre debido a un aumento de las exportaciones, mostró el martes un sondeo privado, aliviando los temores de una brusca paralización, pero apuntando a una economía aún débil que enfrenta considerables riesgos.
El índice final de gerentes de compra (PMI) de HSBC/Markit se mantuvo en 50,2 en septiembre, sin cambios respecto a la cifra de agosto, que fue un mínimo de tres meses, pero por debajo de la cifra preliminar de 50,5.
El subíndice que mide las nuevas órdenes de exportaciones, un barómetro de la demanda externa, se expandió a un máximo de cuatro años y medio de 54,5, aunque la demanda local aún parece débil. El umbral de 50 puntos separa la expansión de la contracción en la actividad según una base mensual.
En un aspecto preocupante, el sondeo mostró una mayor debilidad del mercado laboral, ya que el subíndice del empleo en el sector de manufacturas se contrajo por undécimo mes consecutivo, lo que debería preocupar a los líderes comunistas de China.
La segunda mayor economía mundial economía mundial se ha desacelerado este año debido a que un mayor enfriamiento del sector inmobiliario a pesado sobre una débil demanda interna.
Como se espera que el mercado de propiedades siga enfriándose, los economistas creen que los funcionarios deberán aplicar más medidas de estímulo en los próximos meses para cumplir con la meta de crecimiento del Gobierno para el 2014 de cerca de un 7,5 por ciento.
"En general, los datos en septiembre sugieren que la actividad del sector de manufacturas sigue expandiéndose a un ritmo lento", dijo Qu Hongbin, economista jefe en China de HSBC.
"Nosotros pensamos que los riesgos al crecimiento aún son bajistas y ameritan más políticas monetarias y fiscales expansivas", agregó.
A pesar del fuerte aumento en las órdenes de exportaciones, el nivel de producción general cayó a su punto más bajo en cuatro meses, pero logró mantenerse sobre el umbral de 50 puntos.
Las acciones en Shanghái cedieron sus modestas ganancias iniciales y cayeron a terreno negativo después del reporte.
Sin embargo, los líderes chinos han dicho reiteradamente que no hay cambios dramáticos inminentes en la política.
El primer ministro chino, Li Keqiang, dijo anteriormente este mes que China no puede depender del crédito fácil para impulsar su economía y que seguiría realizando sólo "ajustes precisos" para impulsar la actividad.
Los datos preocupantes más recientes se conocieron durante el fin de semana, con la noticia de que las ganancias de las compañías industriales de China cayeron en agosto respecto al año previo. Muchas las empresas más grandes del país ya están recibiendo fuertes subsidios del Estado.