Por Sophie Hardach
PARIS (Reuters/EP) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su par francés, Nicolas Sarkozy, unieron fuerzas el martes de cara a la cumbre del G-20 en Pittsburgh, acordando trabajar hacia nuevas decisiones sobre la economía y el sistema financiero, informó la oficina de Sarkozy.
En una conversación telefónica, Obama y Sarkozy reiteraron su voluntad para implementar las decisiones tomadas en la última cumbre del grupo en Londres, dijo la oficina de Sarkozy mediante un comunicado.
"Acordaron trabajar en una coordinación estrecha para hacer de la reunión en Pittsburgh un éxito, permitiendo que se tomen nuevas decisiones para asegurar un crecimiento sostenible, reforzar el sistema financiero internacional, reformar las instituciones financieras internacionales y hacerlas más eficientes", decía la declaración.
Más temprano en el día, la Junta de Estabilidad Financiera, compuesta por los banqueros, reguladores y funcionarios de los ministerios de Finanzas del G-20, se reunió en París para prepararse para la cumbre de Pittsburgh del 24 y 25 de septiembre.
La Junta dijo que los bancos deberían separar más capital y tener menos dinero para ofrecer grandes bonos, parte del esfuerzo amplio del G-20 para disminuir el riesgo del sector financiero.
Sarkozy, apoyado por la canciller alemana Angela Merkel, ha presionado por mucho tiempo para que el G-20 apoye límites más duros sobre los bonos.
El británico Gordon Brown, al principio poco proclive a la iniciativa, este mes firmó junto a Sarkozy y Merkel una carta pidiendo que el G-20 adoptase reglas vinculantes sobre los pagos variables para los bancos mayores.
En la carta, los tres líderes le pidieron al G-20 que discuta cómo retirar las medidas implementadas para luchar contra la crisis económica.
Refiriéndose a la conversación de media hora entre Sarkozy y Obama el martes, la oficina del presidente francés dijo que discutieron además sobre Irán y sobre un posible relanzamiento de las conversaciones de paz entre palestinos e israelíes.