Actualizado 03/09/2009 05:39

Sector agrario argentino finaliza huelga el viernes

Por Nicolás Misculin

BUENOS AIRES (Reuters/EP) - El sector agropecuario argentino ratificó que finalizará el viernes una huelga comercial de una semana contra las políticas gubernamentales, una protesta que revivió un duro conflicto de alto costo para la presidenta Cristina Fernández.

La protesta, que se inició en la medianoche del jueves de la semana pasada, paralizó los mercados de carne y de granos.

"Ratificamos que el cese de comercialización concluye el próximo viernes (...) seguimos en protesta y es ese sentido la semana próxima, el día 8, se van a realizar numerosos actos", dijo el miércoles a periodistas Mario Llambías, titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

El sector agropecuario analiza realizar manifestaciones masivas y marchas de tractores como protesta.

"La decisión de la comisión de enlace es continuar luego con marchas en las distintas provincias hasta ciudades capitales para marcar la preocupación del pueblo agropecuario que está sufriendo las consecuencias de unas fallidas políticas", agregó Llambías.

El malhumor de los chacareros -que se reúnen en los márgenes de rutas de todo el país- ante la falta de respuesta del Gobierno podría afectar las exportaciones de Argentina, uno de los mayores proveedores mundiales de alimentos.

La tensión creció en las últimas horas luego de conocerse que el Gobierno extendió a diversas provincias la anulación de beneficios fiscales que habían sido aprobados por el Congreso para paliar los efectos de una sequía que arrasó con buena parte de la hacienda y los cultivos del país.

En los últimos días los productores realizaron marchas con tractores y cortaron parcialmente el tránsito de algunas rutas, pero la dirigencia sectorial pidió calma para que no se generen hechos de violencia como los que tuvieron lugar durante las protestas del 2008.

El año pasado, las fuertes protestas agrarias contra un intento oficial de subir el impuesto a la exportación de soja -el mayor cultivo del país- sumieron al Gobierno de Fernández en una crisis y golpearon la marcha de la economía.

El conflicto también perjudicó a las exportaciones de granos de Argentina y afectó los precios de los mercados internacionales de materias primas.

(Con la colaboración de Walter Bianchi; Editado por Marcel Deza y Silene Ramírez)