NUEVA YORK (Reuters/EP) - Una subasta de bonos del Tesoro estadounidense a 10 años por 20.000 millones de dólares obtuvo el miércoles una sólida demanda, presagiando un buen desempeño para la venta de deuda a 30 años que se realizará esta semana.
La subasta fue una reapertura de la emisión del mes pasado de bonos con vencimiento en agosto del 2019. La demanda fue robusta, basada en un ratio de cobertura de 2,77, por sobre el promedio de 2,58 de las últimas siete reaperturas.
En otra señal de la fortaleza de la subasta, el rendimiento de la deuda fue inferior al nivel en que estaba operando en el mercado de notas ya emitidas, lo que significa que los especuladores no pujaron de modo excepcionalmente agresivo para bajar los precios y elevar los rendimientos.
Inversores extranjeros e institucionales mostraron un buen apetito. Los oferentes indirectos, categoría que incluye a bancos centrales internacionales, se llevaron el 55 por ciento de la venta, el resultado más alto desde noviembre del 2005 y por sobre el promedio de 26 por ciento de las últimas siete reaperturas.
La subasta sigue a una venta de notas de siete años sorprendentemente bien recibida el martes y se produce previamente a la oferta de bonos de 30 años de este jueves.
El Tesoro llevará un total de 70.000 millones de dólares en deuda al mercado mediante las tres subastas de esta semana.
Las ventas de bonos han sido observadas de cerca este año debido al creciente déficit del presupuesto del Gobierno, en particular después de que los inversores cuestionaran en mayo la duración de la calificación "AAA" del crédito de Estados Unidos.